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La presión migratoria que estaba sufriendo Melilla en los
últimos días por la presencia de una bolsa de inmigrantes
irregulares en las zonas limítrofes marroquíes ha descendido
en las últimas horas gracias al dispositivo preventivo que
puso en marcha la Guardia Civil a principios de esta semana.
A preguntas de los periodistas, el delegado del Gobierno,
Abdelmalik El Barkani, explicó ayer que este dispositivo
preventivo de seguridad ha ido más allá de la vigilancia con
las cámaras y personal del Instituto Armado, sino que ha
contado con “la ayuda importante” de un helicóptero, que ha
sobrevolado el perímetro fronterizo en las últimas
madrugadas.
Tal y como se indicó a los medios de comunicación, esta
operación preventiva ha permitido que no se haya registrado
ninguna entrada irregular en los últimos días en Melilla,
dijo El Barkani, que destacó la importancia del dispositivo,
el cual se seguirá llevando a cabo cuando sea preciso.
La intervención del helicóptero no fue necesaria en la
madrugada de ayer porque “ha mejorado un poquito la
presión”, admitió El Barkani, que advirtió no obstante de
que esta situación puede variar con el buen tiempo y las
elevadas temperaturas, como ha ocurrido siempre, ya que
“Ceuta y Melilla son dos puntos calientes en la inmigración
clandestina”.
A este respecto hay que resaltar que la Delegación del
Gobierno no tiene cuantificado el número de inmigrantes
irregulares que puede haber merodeando en las inmediaciones
de la valla fronteriza de Melilla, aunque calculó que puede
haber en torno a 300 o “probablemente más”.
Finalmente, en cualquier caso, el delegado del Gobierno en
Melilla, Abdelmalik El Barkani, dijo que le consta que las
autoridades marroquíes “están trabajando muy bien” para
tratar de evitar que puedan entrar inmigrantes irregulares a
Melilla y “ayudando a que esa presión hacia la ciudad no sea
tan importante”, labor que agradeció el delegado del
Gobierno en Melilla.
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