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					Una de las personas detenidas por el asesinato de Karim 
					Mohamed, miembro de las ‘Brigadas Cívicas’ tiroteado hasta 
					morir el día 24 de julio del pasado año en la barriada 
					Príncipe Alfonso y vinculado a la familia de ‘Tafa Sodia’, 
					se negó a prestar declaración ayer en las dependencias del 
					Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5. Se 
					trata de un hombre apodado ‘Pajarito’, y está imputado junto 
					a Imad ‘Grana’ y Abdelmunin Mohamed. El imputado llegó al 
					Palacio de Justicia acompañado por varias mujeres 
					-familiares- sin escolta policial. El asesinato causó gran 
					conmoción en la ciudad. 
					Uno de los tres imputados por el tiroteo que causó la muerte 
					de Karim Mohamed, de 35 años y hombre de confianza de ‘Tafa 
					Sodia’, ocurrida el pasado día 24 de julio de 2011 en la 
					barriada Príncipe Alfonso se negó ayer a prestar declaración 
					ante la justicia. 
					 
					Se trata de ‘Pajarito’, como es conocido, que ayer 
					comparecía en el Palacio de Justicia, acompañado de varias 
					mujeres de su familia y entorno. 
					 
					El imputado llegó sin custodia policial al edificio de los 
					juzgados donde tenía que prestar declaración ante el titular 
					del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5, que 
					se encarga del caso. 
					 
					Así, según fuentes judiciales, se acogió a su derecho a no 
					prestar declaración.  
					 
					El asesinato se produjo en torno a las 15.30 horas en las 
					inmediaciones del cafetín ‘El Mojito’, contiguo al 
					polifuncional de la barriada. 
					 
					Un vehículo de color verde estacionó en la zona del Poblado 
					Legionario y de él se bajaron los tres pistoleros, quienes a 
					cara descubierta y esgrimiendo armas de fuego comenzaron a 
					disparar “a todo aquel que se encontraba por delante”. Karim 
					recibió al menos tres disparos y aunque fue trasladado en un 
					vehículo particular al Hospital Universitario de Ceuta, los 
					servicios médicos no pudieron hacer nada por salvar su vida. 
					Una segunda persona recibió impactos de bala en su pie, 
					aunque su estado no revistió gravedad.  
					 
					‘Pajarito’ y Himad ‘Grana’ fueron detenidos el mismo mes de 
					julio y enviados a prisión, por su supuesta participación en 
					el tiroteo. Concretamente, ‘Pajarito’, de 26 años, fue 
					detenido por la Guardia Civil en la tarde del 26 de julio, 
					dos días después del crimen. ‘Pajarito’ no opuso resistencia 
					a la detención. 
					 
					Himad ‘Grana’, por su parte, fue detenido a las 05.00 horas 
					de la madrugada del 27 de julio, por agentes de la Policía 
					Nacional. En este caso, la detención no fue fácil ya que el 
					sospechoso espiaba los movimientos policiales. Los agentes 
					lograron engañarle aunque al advertir la presencia policial 
					emprendió una huida, finalmente infructuosa. 
					 
					Con posterioridad, agentes de la Brigada de Policía Judicial 
					lograban detener a Abdelmunin Mohamed, el tercero de los 
					sospechosos de perpetrar el asesinato. Había escapado a 
					Marruecos y con posterioridad fue localizado en el Levante 
					español. Este último detenido se consideraba, según las 
					fuentes consultadas en su día por El Pueblo de Ceuta, como 
					“el más peligroso” de los tres identificados por el 
					asesinato de Karim Mohamed. 
					 
					El fallecido, que tenía esposa y dos hijos, trabajaba en la 
					Brigada Cívica del Príncipe y era considerado “un modelo a 
					seguir” y una persona “muy querido” en la barriada. 
					 
					Amigo de ‘Tafa Sodia’, otro jefe de un clan familiar del 
					Príncipe, enemistado con ‘El Vasco’, era conocido como ‘el 
					cenizo’ y desde doce años antes de su muerte había mantenido 
					una vida “ejemplar”, dejando a un lado los antecedentes 
					policiales que anteriormente le habían marcado por asuntos 
					relacionados con el tráfico de drogas. 
					 
					Con posterioridad al asesinato de Karim Mohamed era muerto a 
					tiros, a mediodía del 28 de septiembre de 2011, Tarek M.M., 
					familiar directo de uno de los tres sospechosos del primero 
					de los crímenes. Es por ello que se asoció esta segunda 
					muerte a un ajuste de cuentas. 
					 
					En este caso, Tarek M.M., de 33 años, recibió varios 
					disparos, tres de ellos en la cabeza. El asesino entró en 
					una cafetería de la barriada Príncipe Alfonso, donde se 
					encontraba la víctima, con un casco integral de motocicleta 
					y el rostro tapado. Sin mediar palabra acribilló a balazos a 
					la víctima. 
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