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					Abdelaziz E.D., quien también es conocido como Karim M., 
					destinado actualmente en misión militar en Líbano, fue 
					juzgado ayer en ausencia por daños a un vehículo policial. 
					Aunque no estuvo presente, ya prestó testimonio reconociendo 
					los hechos por los que ayer fue enjuiciado. 
					 
					Se apreció en el juicio, celebrado en la sala de vistas del 
					Juzgado de lo Penal número 1, un atenuante muy cualificado 
					por cooperación con la justicia. Una persona que le 
					acompañaba, Benachair B., un indocumentado, fue condenado a 
					su vez a cuatro meses de prisión que no cumplirá ya que la 
					pena será conmutada por cinco años de prohibición de pisar 
					territorio nacional. Ayer mismo fue deportado a Marruecos. 
					 
					Mientras, Abdelaziz E.D. fue condenado a una multa de cuatro 
					meses a razón de diez euros al mes. 
					 
					Los hechos se producían el día 10 de abril, a las 03.15 
					horas, en la avenida Reyes Católicos.  
					 
					Abdelaziz y su acompañante se encontraban en estado de 
					embriaguez, agravado por haber ingerido pastillas. 
					 
					Circulaban conduciendo Abdelaziz con riesgo para la 
					seguridad vial. En efecto, según se confirmó por parte de 
					los dos acusados, el coche, un Mercedes 190 que al parecer 
					había sido previamente sustraído en las inmediaciones de la 
					frontera marroquí, hacía maniobras en ‘zig-zag’ y también 
					fue detectado cuando infringía otras normas de circulación. 
					 
					Cuando se le fue a interceptar, y debido al estado del 
					conductor, colisionó finalmente contra un automóvil de la 
					Policía Nacional, al que causó daños. 
					 
					También declaró en la vista, en calidad de acusado, el 
					propietario del vehículo, Loucine O. quien aseguró que había 
					adquirido el coche el día 9 de abril, ésto es, dos días 
					antes de los hechos, y que le había sido sustraído en la 
					frontera marroquí. 
					 
					Aunque en un principio incluso se analizó la posibilidad de 
					devolver el caso al juzgado de instrucción, dado que se 
					habría producido un robo de vehículo, al determinarse que 
					este hecho, de haberse producido, habría ocurrido en 
					Marruecos, se siguió adelante con el juicio. El propietario 
					del automóvil quedó absuelto, ya que no cometió delito 
					alguno. 
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