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                     No se ha tardado en repetir lo que 
					sucedió el pasado día 4. Y es que la multitud de 
					subsaharianos que habita en nuestra ciudad, habiéndose dado 
					cuenta de que “aquí vale todo”, a las primeras de cambio la 
					han vuelto a liar. 
					 
					En Ceuta estamos hartos de tener que soportar a una serie de 
					gentes que llegan por las”rutas de la ilegalidad” y que una 
					vez instalados aquí se encuentran, incluso, con más derechos 
					que los propios habitantes ceutíes. 
					 
					Y la nueva trifulca la volvieron a armar frente al 
					establecimiento “Día” de Bermudo Soriano. Otra vez en el 
					mismo sitio. 
					 
					Esto viene acarreando, además de problemas, miedo en las 
					inmediaciones del establecimiento, y desde el supermercado, 
					hacia el mediodía, se dio aviso al CNP que, de inmediato, 
					acudió para poner orden y para identificar a los integrantes 
					del grupo, en esta ocasión escasamente una docena de ellos. 
					 
					Es cierto que, esta vez, no ha pasado de una simple 
					trifulca, sin las graves consecuencias de la anterior, pero, 
					una vez más, el CNP fue requerido el martes en la misma 
					superficie de Día de Bermudo Soriano. 
					 
					Las razones de la llamada eran las mismas, un nuevo conato 
					de enfrentamiento entre inmigrantes que pretendían hacerse 
					con el control del traslado de los carros de la compra. 
					 
					Es lo de siempre, buscan un lugar al sol, que se apoya en 
					ser el primero en ayudar a los que acaban de hacer la 
					compra. 
					 
					Esto, que aparentemente, no es nada más que “prestar una 
					ayuda” a quienes han estado comprando en el establecimiento, 
					hace que los vecinos se muestren inquietos, porque si hace 
					unos días hubo lío, en cualquier otro momento lo podrá haber 
					otra vez. 
					 
					No somos expertos en asuntos policiales, pero sí somos 
					personas que pagamos impuestos y queremos tranquilidad y 
					orden, por lo que tenemos que seguir haciendo preguntas. 
					¿Cómo se puede atajar la actuación de estos indocumentados 
					en cualquiera de las partes de Ceuta, donde se instalan?. 
					 
					En esta ocasión, aunque fueran menos, se volvió al mismo 
					lío, un grupo de subsaharianos, unos diez, se enzarzaron en 
					una discusión con las dos personas a las que el centro 
					comercial ha encargado el servicio de recogida de los carros 
					de la compra. 
					 
					Algo, aparentemente, sin importancia pero a lo que estos 
					indocumentados van creando, más y más, problemas. 
					 
					Y aquí salen perdiendo todos, menos estas gentes, que van a 
					lo suyo. Los vecinos siguen intranquilos, porque no 
					descartan la posibilidad de que se sigan repitiendo actos de 
					este tipo que puedan terminar en un nuevo disturbio. 
					 
					También sale perdiendo el Día en el que se vienen repitiendo 
					las trifulcas o las algaradas de esta gente, ya que hay 
					clientes que, para no verse envueltos en ningún problema, se 
					van a comprar a otra parte. 
					 
					La situación, una vez que ha comenzado, no parece que tenga 
					trazas de ir terminando muy pronto, con lo que los 
					encargados del orden deberían solucionarlo, por las buenas o 
					por las malas y se debería apartar de este tipo de 
					establecimientos a estas gentes que lo único que hacen es 
					perjudicar y crear problemas a los demás. 
					 
					Ha llegado el momento de decir que estamos hartos de tanto 
					indocumentado como tenemos alrededor, y que lo único que 
					están haciendo, cada día, es crearnos muchos problemas. 
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