|
El boletín oficial de la Ciudad dice que el estatuto básico
del empleado público recoge que es “personal enventual el
que, en virtud de nombramiento o asesoramiento espacial,
siendo retribuido con cargo a los créditos presupuestarios
consignados para tal fin”.
Aparte de los aspectos formales, de la virtualidad que se ha
dado a esta cuestion, lo cierto es que ha sido la crisis
económica, los planes de ajuste y sostenibilidad, los que
han dado lugar a que estas diez personas se queden en el
calle a partir de mañana. Ayer, alguno de ellos desarrollaba
una de sus últimas funciones, como era el caso de Adelaida
Álvarez, como miembro del consejo de administración de RTVCE.
El caso de todos los afectados no se ha visto vinculado a
uno de los supuestos que se recogen como “causa” para el
personal de confianza: el cese o expiración del mandato de
la autoridad que los nombró. No ha sido así: se prescinde de
sus servicios para ahorrar gastos, para prescindir de lo que
se estima prescindible, precisamente en la misma semana en
la que los políticos, a los que prestaban sus servicios de
asesoramiento, alzaron su mano para defender no “rebajarse”
el sueldo, una petición que formuló el PSOE y apoyó
Caballas, pero no así el partido popular.
|
OPINIÓN
