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Mi reencuentro con Sergio nos
permite recordar nuestras vivencias, cuando coincidimos en
el C.P.”MAESTRO JUAN MOREJÓN”; él como alumno y yo como
maestro. Sergio forma parte de una importante saga de
alumnos, que también estuvieron en el mismo Centro escolar.
Magníficos todos que en la actualidad forman un grupo de
trabajo dedicado a la restauración “capitaneado” por uno de
los mayores, Oscar.
De nuestra improvisada “charla callejera”, Sergio me dice
que lo que más le gustaba a él, en el Colegio, eran
“nuestras vacaciones del verano” (¿). Si, las vacaciones de
los maestros. Me desconcierta algo lo de magnificar nuestras
vacaciones, cuando, en general, en la sociedad siempre han
sido muy cuestionada. Pero, me aclara, Sergio: “Es que con
vuestras vacaciones, también disfrutábamos nosotros.
Cuestión nada discutible, que también nos beneficiábamos los
alumnos. Lo que no tengo claro si las dan por los maestros,
o por nosotros, los alumnos”.
Ahora, según una nota de prensa, el Ministerio de Educación
se plantea que Julio sea lectivo, ya que estudia utilizar el
citado mes para aquellos alumnos que con mayores problemas
de rendimiento tengan un refuerzo académico.
Según voces autorizadas del Ministerio, una de las
posibilidades que están sobre la mesa es que el mes de
Julio, para los alumnos que tengan problemas de rendimiento,
sea un momento donde se les pueda dar refuerzo y apoyo. Sin
aportar detalles, sobre cómo y cuándo podría aplicarse esa
iniciativa, entre otras cosas porque están en marchar otra
medidas más urgentes.
Esta medida ya se puso en práctica en la Comunidad
Valenciana durante 2011, en una especie de prueba piloto
–bajo la denominación de “Plan Exit”- a la que se sumaron
varios centros. En el presente mes de Julio el número de
Institutos que se han sumado a este plan de carácter
voluntario para dar clases de refuerzo en el mes de Julio ha
aumentado hasta los 45 centros.
El grado de eficiencia de este proyecto en la Comunidad
Valenciana se concretó en que el 80% de los alumnos
aprobaron en los exámenes de Septiembre las asignaturas que
tenían pendientes.
La Generalitat Valenciana también ha intensificado para el
presente mes de Julio la agenda de los profesores para que
estén a disposición de su departamento –aunque no de manera
presencial en el centro educativo- tanto en clases de
formación como en planificación del nuevo curso para evitar
la picaresca que se daba entre algunos docentes que este mes
lo “añadirían” a sus vacaciones (¿)
Por parte del Ministerio, se critica la “rigidez” de nuestro
sistema educativo, en el que todos los alumnos deben seguir
la misma trayectoria y destacó que la mayor parte de los
países que tienen sistemas educativos, con mejores
resultados, tienen más flexibilidad. “Dependiendo de las
aspiraciones y necesidades de cada alumno, se canaliza pro
una trayectoria u otra y eso desarrolla todo su potencial”.
En la misma línea se añade que en otros países, unas pruebas
de evaluación al final de cada etapa señalan cuáles son los
niveles de conocimiento que se espera de los alumnos al
final de cada etapa. “Padres, alumnos y profesores saben
cuál es el nivel que se exige y tienen una
corresponsabilidad para que los alumnos lleguen a un buen
nivel cuando llegue la evaluación al final de cada etapa”.
Se piensa en el Ministerio que la Selectividad tiene un
nivel de exigencia muy bajo y “no es un filtro real”.
“Después depende las Universidades el modelo que quieran
implementar”. Puede exigir un determinado nivel de nota en
esa prueba, o notas específicas que consideren más
importantes, o desarrollar su prueba de evaluación que
consiste en una entrevista, una prueba, es algo que queda un
poco en manos de las propias Universidades.
Y es una obviedad que se diga que el profesorado es la clave
de la reforma educativa. Tenemos un profesorado trabajando
en un momento muy difícil, desmotivado, y esto se traslada a
los alumnos. Lo que queremos es que los alumnos tengan
mejores resultados, y que los profesores estén motivados y
transmitan este nivel e exigencia a los alumnos.
Por otra parte el PP insiste en la autoridad del
profesorado. Para tal efecto ha registrado una proposición
no de ley, para su debate en el Pleno del Congreso, en la
que reclama el reconocimiento de la figura del profesor
autoridad pública en el ejercicio de su actividad, además de
que se desarrolle el Estatuto del Docente. El grupo Popular
considera que sin la recuperación de la autoridad del
profesorado será “difícil” recuperar la calidad en la
enseñanza y reducir las actuales cifras de fracaso y
abandono escolar.
Y retomando lo de “Julio-lectivo” surge una pregunta de
inmediato: ¿Quiénes serán los responsables de atender, en
ese período, a los alumnos con necesidad de atenciones
especiales?. Si se trata de recurrir al propio profesorado,
el programa no se llevará a cabo. Quiero recordad que hace
muchos años, cuando se quería solucionar el problema del
fracaso escolar, en nuestros colegios, los alumnos
suspendidos volvían al centro, atendidos unas horas por la
mañana por maestros que no habían conseguido la
incorporación al Magisterio Nacional. Estos profesionales
posiblemente fuesen atendidos, en aspecto económico, por el
propio Municipio o por algunas Entidades locales. Lo cierto
era que, por las orientaciones de los tutores, se conseguía
mejorar a todos aquellos que, bien aconsejados, asistían a
las clases.
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OPINIÓN / EL MAESTRO
