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El servicio especial de Cruz Roja en la Feria ha realizado
un total de 308 asistencias durante la feria. Tal como
informó este diario en su edición de ayer, la media es de
unas 65 personas atendidas cada noche, una cifra que se
aproxima a la del año pasado. Entre las asistencias hay un
traslado al hospital por herida grave, 80 atenciones por
heridas en general, cuatro crisis de ansiedad y nueve
intoxicaciones etílicas (tres de ellas a menores). A
petición del 061 se atendió y trasladó a urgencias a un
policontusiondo y lo mismo se hizo con una mujer que sufría
una amenaza de aborto.
Según informó el portavoz de la institución humanitaria,
Germinal Castillo, en la última jornada de fiesta fueron 70
las atenciones, dos de las cuales requirieron traslado al
hospital, en un caso por una posible fractura de rodilla y
en el otro por coma etílico. Agresiones, lumbalgias y
heridas por cortes con cristales han sido las incidencias
más frecuentes en estos cinco días.
Cruz Roja ha dispuesto en el Real de un enfermero todos los
días y de un médico de viernes a domingo, lo que ha
evitado, señala Castillo, “colapsar” las urgencias
hospitalarias.
La institución humanitaria ha contado y agradece la
colaboración de sus 15 voluntarios, así como el apoyo del
servicio de coordinación de emergencias, 112, el 061, el
SUAP, Urgencias del Hospital y de las Fuerzas de Seguridad.
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