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					La Ciudad Autónoma aprobó ayer, a propuesta de la consejera 
					de Asuntos Sociales, Rabea Mohamed, un convenio de 
					colaboración con la entidad Cruz Blanca para mantener el 
					programa de ayuda a domicilio durante el segundo semestre de 
					2012. “Este programa está cofinanciado en un 50% por el 
					Estado y otro 50% por la Ciudad”, recordó Martínez para 
					aclarar que en el primer semestre la Administración local 
					abonó los 979.000 euros del convenio que firmó a principios 
					de año, mientras que ahora lo hará el Gobierno central.  
					 
					El programa beneficia a una media de 400 usuarios cada año, 
					según trasladó Martínez. Además, genera 75 puestos de 
					trabajo para realizar más de 10.000 servicios de comida 
					anualmente. En total, gracias a este programa se realizan 
					58.000 horas destinadas a ayudar a los mayores que más lo 
					necesitan y que peor lo están pasando en estos tiempos. 
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