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					La empresa encargada de la recogida de animales muertos en 
					la ciudad autónoma, Athisa, recogió ayer, sobre las dos de 
					la tarde, los restos de una tortuga de unos sesenta 
					centímetros que había aparecido en la ribera de la playa de 
					Fuentecaballo a lo largo de la mañana.  
					 
					Una vecina que se encontraba pasando el día en la playa fue 
					quien alertó al Servicio de Protección de la Naturaleza de 
					la Guardia Civil, Seprona, que posteriormente se puso en 
					contacto con la empresa mencionada para llevar a cabo la 
					recogida del animal. Según un trabajador de la empresa de 
					limpieza Urbaser, que estaba trabajando en la zona, este 
					sería el segundo ejemplar de tortuga que habría aparecido en 
					la costa en esta misma semana, aunque este dato no ha podido 
					ser confirmado por los servicios de Sanidad Animal de la 
					Ciudad Autónoma.  
					 
					Según comentó una de las personas que alertó de la tortuga 
					muerta a los servicios de recogida, era de la clase “que se 
					come a las medusas”, que precisamente este verano se han 
					encontrado en un número importante en las costas ceutíes.  
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