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                     No cabe duda de que hoy la gente 
					de bien es la única que puede ser detenida sin presentar 
					fuerza ante la policía, mientras que todo aquel que anda por 
					caminos tortuosos se resiste a las fuerzas de seguridad, eso 
					cuando menos, y en gran cantidad de casos, incluso, presta 
					cara o pone resistencia a quienes defienden el orden. 
					 
					Viene esto a cuento de ese policía que recientemente ha 
					recibido tres puñaladas, cuando intentaba detener a un 
					ladrón. 
					 
					El policía herido, de momento está en el hospital, mientras 
					que el ladrón, en cuatro días volverá a estar en la calle, 
					si es que no está ya. 
					 
					Es lo que hay, son las leyes que tenemos y es la seguridad 
					que existe en nuestros días y en nuestras calles. 
					 
					Afortunadamente, dos agentes compañeros en la Policía 
					Nacional, consiguieron detener al ladrón, en el monte, mucho 
					rato después de este incidente. 
					 
					La situación se produjo cuando un agente del CNP se dio 
					cuenta que un individuo intentaba robar en una dependencia 
					de las cabañas de Miguel Luque. 
					 
					Naturalmente, el policía, y más yendo de paisano, podría 
					haber “pasado” de largo, sin embargo lo primero que hizo fue 
					intentar detener a aquel sujeto que se revolvió, forcejeó 
					con el policía, le asestó tres puñaladas y escapó monte 
					arriba. 
					 
					Era el primer momento, al que siguió de inmediato, el 
					despliegue de un dispositivo de coordinación para dar caza 
					al ladrón. 
					 
					A primeras horas de la mañana, escondido entre los 
					matorrales, el ladrón fue detenido. 
					 
					Era el punto final de este suceso. A partir de ahora ya será 
					la Justicia la que termine con el asunto y ojalá que podamos 
					decir que este “macarra” va a estar “a la sombra” un buen 
					tiempo. 
					 
					Y lo que parece que no era ninguna broma eran las 
					intenciones del sujeto que apuñaló al policía, pues llevaba, 
					según parece, un cuchillo de grandes dimensiones, con el que 
					atacó al policía y hubiera atacado a cualquier otra persona 
					que le saliera al paso, en esos momentos. 
					 
					Lo que no me explico, y lo digo de verdad, es como otro 
					agente, que también estaba en las inmediaciones y que salió 
					con la pistola para intentar detener al ladrón, no logró que 
					ese individuo se quedara allí. 
					 
					Las cosas están claras, un disparo y una mínima herida al 
					ladrón “hubieran dejado sin pan” al policía, con lo que en 
					vez de disparar el individuo se escapó al monte. 
					 
					Es lo que tenemos. Un agente herido, un despliegue de 
					fuerzas de la PN, Guardia Civil y Policía Local, para 
					rastrear y detener a un delincuente que volverá a sus 
					hazañas, en cuanto se le antoje, mientras que el policía 
					herido, afortunadamente, se restablece, es lo mínimo que 
					podíamos desear. 
					 
					Todas las noticias sobre este asunto indican que el hombre 
					en cuestión se resistió a la autoridad, con lo que ¿Qué 
					sanción va a tener?.¿Cuánto tiempo estará sin libertad?. 
					 
					Tratando de ser sinceros, no creo que se pase mucho tiempo a 
					la sombra, pero así están las cosas, y las leyes son más 
					duras para los que mejor acostumbran a cumplirlas, mientras 
					que para la “chusma” las leyes o no existen, cosa que se da 
					con demasiada frecuencia, o esa chusma se las salta a su 
					manera. 
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