PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

OPINIÓN - DOMINGO, 7 DE OCTUBRE DE 2012

 

OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM

Pobreza extrema
 


Quim Sarriá
quimsarria@elpueblodeceuta.com

 

Cuidar la salud es un tema muy importante cuando se llega a determinada edad. No hay que descuidarse ni un segundo, lo digo por experiencia propia.

Acabo de salir de la enésima sesión en la cámara de tortura, digo en la sala del Acelerador Nuclear de radioterapia, en un momento bastante complicado: con un resfriado o catarro de aúpa.

Si solo fuera por el catarro, con una aspirina y un vaso de leche bien caliente con algo de coñac, no importa la marca, en cuatro días habría pasado el trance con resultados finales de tener la nariz un poco más roja de lo habitual y unos ojos que se parecen mucho a los de la sufrida Magdalena en el último estertor de su amado.

Pero en estas circunstancias, con la radioterapia de fondo, resulta un suplicio añadido.

¿Por qué?, porque con el catarro viene aparejado un fuerte y prolongado ataque de tos que, como muchos de Vds. sabrán, conlleva bruscos movimientos de la zona lumbar que, en mi caso, produce un dolor indescriptible. Justamente en la zona donde inciden los disparos radioactivos de la terapia.

Bueno, dejo por hoy el tema de la salud y metámonos de cabeza en los problemas matemáticos de nuestra economía.

El poder adquisitivo de los jubilados, pensionistas por más señas, como el de los funcionarios, ha perdido mucho, muchísimo, que nos deja a cuatro velas desde el 15 de cada mes como media. Diez días en penuria, suelen cobrar cada día 25, que agudiza la inteligencia de las abuelas y abuelos para conseguir llegar sin padecer, aunque la salud se les resienta por el enorme esfuerzo.

Algunas y algunos no lo consiguen y se ven obligados a acudir a centros benéficos de asistencia social. Mala imagen para el país.

Con frecuencia observo en cualquier población del país a gente, aparentemente de clase media, buscando y rebuscando en los contenedores de basura algo que llevarse a la boca, con el rostro tan desencajado por la rabia y la desesperación.

Por no escribir de los Centros de Distribución Alimentaria, como Mercabarna, donde cientos de personas, inmigrantes en la mayoría de los casos, esperan el final de la jornada para sacar tajada de las sobras alimentarias que las distribuidoras suelen arrojar a los contenedores, ora por caducidad, ora por ser sobras invendibles, ora por ser perecederos, etc.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto