En épocas de crisis económica corremos el riesgo de situar a
la salud mental en un segundo plano dentro de nuestras
prioridades. Sin embargo, desde la Confederación FEAFES
estamos convencidos de que, justo en estos tiempos, es más
necesario que nunca prestar atención a los diferentes
problemas de salud mental, como personas, como integrantes
de la sociedad y desde el conjunto de las Administraciones
Públicas.
En primer lugar, desde FEAFES invitamos a todas las personas
a realizar esa “inversión” en su propia salud mental, así
como en la de las personas de su entorno.
Una inversión que no tiene por qué medirse en euros, sino en
adoptar otros modos de vida y valores: organizar nuestro
tiempo de forma menos estresante; cuidar –y dejarse cuidar-
por nuestros familiares, amigos, compañeros de trabajo, etc;
y sobre todo, cambiar nuestra visión ante los problemas de
salud mental, para afrontarlos con decisión y apoyar a quien
los presenta como cualquier otro problema de salud más.
En segundo lugar, invitamos a la ciudadanía a que defienda
con firmeza el mantenimiento de los servicios sanitarios y
sociales de atención a la discapacidad y a la salud mental,
como una parte más de sus derechos fundamentales. Así, como
parte de la sociedad civil organizada, las asociaciones de
personas con enfermedad mental y sus familias reunidas en
FEAFES ofrecemos nuestra colaboración a toda aquella
institución o Administración Pública que se proponga mejorar
la calidad en la atención a las personas con enfermedad
mental.
Desde la Confederación FEAFES consideramos que es necesario
completar y aumentar los servicios que se prestan a través
de los distintos recursos, principalmente en las Unidades de
Salud Mental, por lo que las actuaciones de las
Administraciones Públicas deben dirigirse al desarrollo y
mejora de esta red de servicios, no a su reducción o
deterioro.
Además, desde FEAFES reclamamos que ningún cambio
legislativo se traduzca en el empeoramiento de los servicios
de atención en salud mental, y así se lo hacemos saber al
conjunto de Administraciones Públicas y dirigentes
políticos. De este modo, reiteramos nuestro objetivo de
hacer cumplir de la Convención ONU de los Derechos de las
Personas con Discapacidad ratificada por España.
Asimismo, nos parece especialmente preocupante que los
recortes presupuestarios se puedan traducir en que parte de
la población vea limitado su derecho a recibir atención
social o sanitaria, puesto que esto supondría una grave
deterioro de la salud de estas personas, y en muchos casos,
una condena a la exclusión social.
En este sentido, desde FEAFES proponemos una serie de
medidas como la prevención, la atención comunitaria, o la
detección precoz, que suponen una mejora en las prestaciones
al conjunto de la población, al tiempo que pueden permitir
un ahorro en las cuentas públicas.
Asimismo, consideramos fundamental incrementar los esfuerzos
para conseguir que la integración a través del empleo sea
una oportunidad real para las personas con trastorno mental.
Por último, debemos reincidir en que la lucha contra los
prejuicios y el estigma asociado a las enfermedades mentales
debe ser un objetivo compartido por todos para lograr una
sociedad más justa y más inclusiva.
Por todo lo anterior, en esta celebración del Día Mundial de
la Salud Mental de 2012, desde FEAFES manifestamos nuestro
compromiso en seguir trabajando para la concienciación
social de los problemas de salud mental, así como la
normalización de este tipo de trastornos. Una normalización
que debe traducirse en la garantía de la atención adecuada y
en la eliminación progresiva de cada de una de las barreras
que todavía impiden a las personas con trastorno mental el
disfrute de cualquiera de sus derechos.
Ése es nuestro compromiso, y la meta que persigue todo
nuestro trabajo. Hoy, y todos los días del año.
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