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OPINIÓN - DOMINGO, 25 DE NOVIEMBRE DE 2012

 
OPINIÓN

Miscelánea semanal

Por Manuel de la Torre


LUNES 19.

Frente al edificio municipal hay un hombre que todos los días permanece allí varias horas anunciando sus desgracias. Que son muchas. Está casado y es padre de dos hijos. No tiene trabajo y está a punto de quedarse sin la ayuda que recibe. Necesita, pues, que lo enchufen en cualquier sitio para ganarse los ‘grabieles’. Me han hablado muy bien de él. Y, aunque han pasado bastantes días desde que lo vi por vez primera, hoy es cuando he decidido preguntarle qué espera permaneciendo allí en la acera luciendo sus desgracias en un cartel que le cuelga del cuello. Y me cuenta lo que me tiene que contar. Y descubro a una persona centrada. Y, tras oír la versión de sus problemas, se me cae el alma a los pies de ver cómo aguanta impertérrito la humillación de permanecer en el centro de la ciudad pidiendo que no se le deje fuera del circuito laboral. Alguien que es capaz de exponerse en plena calle a padecer las miradas de cuantos la transitan, tragándose su orgullo, es merecedor de un empleo. Máxime cuando uno sabe que hay Fulanos colocados a dedo en sitios donde ni rinden ni aparecen por el tajo.

Martes. 20

Me encuentro en una reunión donde sale a relucir el nombre de José García Cosío, quien fuera funcionario municipal y, sobre todo, cronista de la ciudad. Y se me pregunta si tuve la oportunidad de conocerlo. Y digo que sí. La primera vez que hablé con él fue en septiembre de 1982. Llegó haciéndose notar al Rincón del Hotel La Muralla, alardeando de ese vozarrón singular que tenía. Y se le ocurrió decirme que en cuanto echara al equipo atrás sus protestas se harían notar en el Murube. Yo era, entonces, entrenador de la Agrupación Deportiva Ceuta. A partir de ese momento comencé a tratarlo. Y nos fuimos entendiendo. Pasados los años, habiendo yo dejado el fútbol y dedicado a escribir en un periódico local, llegué al Centro de Hijos de Ceuta y en cuanto me vio no se pudo aguantar. Y se dirigió a mí en los siguientes términos: “¿Cómo es posible que yo lleve la tira de años escribiendo y cuando miro a mi alrededor veo que la gente habla solamente de lo que tú has escrito, cuando me consta que llevas nada y menos en la profesión?”. Lo miré fijamente, y tras un ligero carraspeo, le respondí: uno es lo que la gente quiere que sea. Así que no te comas el coco y vámonos a otro sitio a tomar el aperitivo. Recuerdo que nos fuimos a Pancho: bar que estaba recién inaugurado. Y allí fuimos forjando nuestra amistad. Así que tuve la oportunidad de visitar su casa y su despacho. Donde trabajaba con fichas de valor incalculable. Sentí su muerte. Pues ocurrió cuando nuestra amistad se había consolidado. Fue un tipo extraordinario. Y muchas veces me acuerdo de él.

Miércoles. 21

Con Paco y Natividad disfruto yo de una amistad reciente. No ha llegado aún a los dos años. La primera vez que hablamos fue debido a que a ellos acababan de convertirse en propietarios de un perro precioso y me lo estuvieron celebrando. Sabedores de cómo me gustan a mí los animales y de qué manera vengo disfrutando de mi Oasis: labrador que me tiene comida la sesera. A mí a y los míos. Yo vi crecer a Pepón. Que así se llamaba el perro de mis amigos. Pepón era la alegría de la calle Jáudenes. Y había conseguido que el matrimonio fuera dichoso con el comportamiento de un animal que les procuraba mucha alegría. Hace un mes, más o menos, Pepón dio muestras de sentirse mal. Y mis amigos se desvivieron por él. Pero, tras una dolorosa intervención, su mal dio la cara. La cara amarga: la de padecer una enfermedad incurable. En la calle Jáudenes, todos los que conocemos a Paco y Natividad, hemos podido comprobar lo que significaba ese perro para nuestros amigos. Los animales también dejan huella. De Pepón seguiremos hablando cada vez que se encarte.

Jueves. 22

Decido caminar cuando la tarde está a punto de convertirse en noche. Transito por Cañonero Dato cuando me topo con Julián Manuel Domínguez Fernández. Máximo responsable de Unión Progreso y Democracia de Ceuta. Con quien no cruzaba palabra alguna desde hacía ya mucho tiempo. Pero mucho. A Julián lo conocí yo en la década de los ochenta. Que ya ha llovido. Y debo decir que siempre me cayó la mar de bien. Persona culta y en posesión de un gran historial médico, da gusto pegar la hebra con él. Lástima que no me sea posible conversar más veces con alguien que siempre se mostró atento conmigo y me dispensó un trato exquisito. Aún recuerdo el estupendo artículo que me dedicó hace años para responderme a unas palabras mías sobre UPyD. Con políticos así, uno no tiene el menor inconveniente en dedicarle los ditirambos de rigor. Que según Juan Ramón Jiménez nunca deben pasar de tres.

Viernes. 23

De Julio Camba, escritor y periodista, decía Pedro Sainz Rodríguez que siempre había combinado durante su existencia los rasgos del aldeano gallego y del castizo madrileño. Así no sólo estuvo lleno de “saudade”, sino que reflejó la alegre convivencia madrileña de los años veinte en el Ateneo, en el Círculo de Bellas Artes y en el Casino de la calle de Alcalá. De Camba he leído yo ‘Haciendo de República’. Donde dice lo siguiente del federalismo: “Los conceptos de autonomía y federalismo no son conceptos análogos, sino conceptos opuestos. Para algunos energúmenos es lo mismo ensamblar las piezas de un puzzle, a fin de formar un cuadro, que coger un cuadro y hacerlo añicos, al objeto de crear un puzzle. Y era igual el aumento de poder en la unión con otros países que desmembrar el territorio nacional en regiones más o menos independientes”. Semejante forma de pensar es la que puede llevar al desastre electoral a los socialistas en Cataluña. Deseo equivocarme.

Sábado. 24

El Ceuta, perseguido hasta la extenuación por la Federación de Fútbol de Ceuta, ha conseguidwo un nuevo punto fuera de casa. Lo ha logrado frente al Cádiz B. Y sigue ocupando un puesto destacado en la clasificación. De este equipo se puede y se debe esperar lo mejor. Ya que sus componentes nos están demostrando que el entusiasmo impera por encima de todos los contratiempos. Por más que ni siquiera se les facilita la posibilidad de que los entrenamientos se hagan en horario adecuado a un conjunto semiprofesional. El Ceuta está compitiendo para permanecer en la categoría. Debido a que su economía está bajo mínimos y encima cuenta con la aversión de los directivos de la federación y de las autoridades locales. Handicap suficiente para que sus dirigentes perdieran el interés que les hace permanecer al frente de una tarea complicada. Pero a mí me consta que no están dispuestos a venirse abajo por más que deban soportar lo que no está en los escritos. El punto de Cádiz debe servir para que el próximo partido en el Murube la afición clame contra quienes desean fervientemente que el Ceuta desaparezca.
 

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