La inmensa mayoría de los
españoles, un 71%,, quieren que el Estado responda con rigor
y firmeza al desafío de Arturo Mas. Esa inmensa mayoría de
la que hablamos aboga por recurrir primero la Constitucional
para frenar la consulta y solicita del presidente del
Gobierno inhabilitar al Arturo si desobedece una sentencia
que impida llevar a cabo la consulta independentista que,
del mismo modo, apoya su Junquera.
Mariano Rajoy, presidente del Gobierno español, debería
tener muy presente la opinión de la inmensa mayoría de los
ciudadanos y obrar en consecuencia. Aquí no caben paños
calientes, hay que coger, como vulgarmente se dice “el toro
por los cuernos” y aplicar la ley a rajatabla, con todas sus
consecuencias.
Los españoles saben distinguir perfectamente entre la
aplicación de la ley con un posible castigo a los catalanes,
sin ser partidarios de poner condiciones políticas a cambio
del dinero del Fondo de Liquidez Autonómica que el Estado da
a la Generalitat..
Ya está bien del cuento chino, de dar dinero y mas dinero a
los catalanes, del bolsillos de todos los españoles, cuando
estos además se niegan a a la enseñanza del español en las
escuelas de esa Comunidad Autónoma.
Dice nuestra Constitución que “todos los españoles somos
iguales ante la ley”. Pues eso, que seamos todos iguales y
el que incumpla las leyes dé con sus huesos en la trena, se
llame como se llame y ocupe el cargo que ocupe, sea el
presidente de la Generalitat o el alcalde de Matalaburra de
Abajo.
Qué pasa si en aplicación de la ley se inhabilita a Arturo.
No pasa absolutamente nada. ya está bien de tener tanto
miedo a algunos dirigentes del pueblo catalán y plegarse a
todas sus peticiones, ante las reacciones que estos dicen
que van a tomar, si no se les da el dinero y las
competencias que piden.
Más vale ponerse una vez colorado, que ciento amarillo. No
más paños calientes. No más acuerdos e inclinarse ante estos
politiquillos del tres al curto. Cataluña no es más que un a
parte de España, a la que hay que tratar como al resto, sin
más privilegios que los que le correspondan.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no debe echar en
saco roto el deseo de la inmensa mayoría de los españoles,
sobre la decisión ` que debe tomar ante la chulería barata
del Arturo y el Junquera, respondiendo con rigor y firmeza
haciendo cumplir la ley. Y si la ley dice, por un suponer,
que la secesión está castigada con cinco años de cárcel.
Pues a aplicar la ley. No en vano, insistimos, según nuestra
Constitución, “todos los españoles somos iguales ante la
ley”
Y ya puestos, ante el clamor un 87% de los españoles
consideran que hay motivos para que la Audiencia Nacional
abra un sumario sobre los indicios de corrupción del partido
gobernante en Cataluña durante más de un cuarto de siglo.
La inmensa mayoría de los españoles le piden al presidente
del Gobierno, que actúe con mano dura, sin paños calientes
ante estos independentistas de pacotilla, haciéndole cumplir
la ley. El cumplimiento de la ley es lo que estamos
esperando la inmensa mayoría de los españoles.
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