sociedad - JUEVES, 31 DE ENERO DE 2013

CEUTA
Patricia Gardeu
ceuta@elpueblodeceuta.com

La Consejería de Sanidad ha activado un plan de acción para la atención a los varamientos de grandes cetáceos, de 1.500 kilogramos. En el operativo colaboran también colaboran Parque Móvil, Delegación del Gobierno, Salvamento Marítimo, Capitanía Marítima, Obimace, Guardia Civil, Autoridad Portuaria y la Casa del Mar.

Coordinados por la Consejería de Sanidad y Consumo, Parque Móvil -a través de la Consejería de Presidencia y Gobernación-, Obimace -a través de la de Medio Ambiente, Servicios Comunitarios y Barriadas-, Delegación del Gobierno, Guardia Civil, Autoridad Portuaria, Salvamento Marítimo, Capitanía Marítima y la Casa del Mar han puesto en marcha un plan de acción conjunto para la atención a los varamientos de grandes cetáceos.

En concreto, animales de más de 1.500 kilogramos, según explicó ayer en rueda de prensa el consejero de Sanidad y Consumo, Abdelhakim Abdeselam, quien estuvo acompañado por la técnico veterinario de su consejería Sonsoles Carretero, y por representantes de las entidades que colaboran en este operativo. Este plan -explicó Abdeselam- busca “dar una respuesta inmediata” para cumplir tres objetivos: “Minimizar los riesgos de salubridad, economizar los recursos y gestionar los restos para posibles estudios científicos que se realicen con fines educativos”. De este modo, a estos animales se les suele practicar la necropsia para determinar las causas de su muerte, aunque, según explicó la veterinaria, este procedimiento no se ha llevado a cabo en varios de los últimos cadáveres de animales varados en la costa ceutí porque por “el estado de putrefacción”, la necropsia “no aportaría datos significativos”.

La principal ventaja de este plan conjunto es, según el consejero, un ahorro estimado de entre 25.000 y 40.000 euros por animal, puesto que hasta ahora para recoger a los grandes cetáceos la Consejería necesitaba contratar una empresa privada que transportara el cadáver, mientras que con la implicación de todos estos departamentos, el trabajo se realiza de manera “gratuita” porque cada uno de ellos aporta sus “recursos materiales y humanos”.

Hasta el momento se han recogido a través de este plan de acción dos animales, y en ambos casos el plan de acción se ha realizado en un tiempo máximo de dos horas. Este plan, a grandes rasgos, consiste en: el aviso al 112 de que hay un varamiento para que ponga en marcha el plan; aviso a la veterinaria de Sanidad y activación del plan; visita del biólogo marino y de la veterinaria responsable; avisos a los organismos que participan en el plan; activación del plan con una demora máxima de 48 horas; remolque del animal; traslado al pudridero; depósito del cuerpo, y cobertura del cadáver con plástico y grava o cemento.
 

Finaliza, tras capturar gatos y perros, el plan de la rabia

El consejero de Sanidad ratificó ayer que se realizan capturas de gatos callejeros. “La recogida se está realizando y la mayoría están siendo dados en acogida”, aseveró. Una afirmación que la Protectora de Animales ha negado, al menos, a través de su entidad. Por ello, Abdeselam fue cuestionado sobre cómo se estaban realizando estas adopciones si no eran a través de la Protectora. La respuesta del consejero fue: “Nos hemos reunido con la Protectora porque tenemos que firmar el convenio de colaboración y nos darán la memoria correspondiente a las actividades que se están realizando”. El consejero criticó a esas personas que cuidan y alimentan a los gatos callejeros. “La masificación de la población felina en distintas zonas no es la más adecuada porque esos gatos pueden ser alimentados indebidamente y ponen en peligro a esos animales”, apuntó el responsable del área, quien asegura que desde Sanidad Animal “se está procurando el equilibrio entre la salud pública y la sanidad animal” y que por ello se ha realizado un “grupo de trabajo”. El consejero ha tomado estas medidas -por las que ha recibido múltiples críticas por el sacrificio de gatos- amparándose en las medidas de contingencia de la rabia, iniciadas en agosto y que terminan el sábado. Tras seis meses, el balance que Abdeselam realiza es: “Ha ido bien porque todas las medidas tomadas han ido destinadas a la conservación de la salud pública como prioridad, y también a la protección de la sanidad animal. En líneas generales bien, la gente ha respondido, y la situación que aconteció tenía que ser esta, siguiendo instrucciones de las autoridades sanitarias y del Instituto Carlos III”. Abdeselam añade que se mantendrán “medidas de prevención y precaución con animales potencialmente peligrosos o aquellos que puedan provocar daño en la salud pública”.