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Una vecina de la calle Marqués Carrasco, en la barriada
de Hadú, teme que su casa, en la que reside con su hija y
dos nietos menores de edad, se le “caiga” un día encima a
causa de las obras ilegales de un vecino. Según explica
Arquía, los desperfectos no sólo afectan a su vivienda, sino
también a la de un tercero al que se le ha “movido” la suya.
“Con el viento que hace estos días, me temo lo peor”,
lamenta.
Arquía vive con su hija Saleia y con dos nietos pequeños en
una humilde casita de la barriada de Hadú afectada, dice,
por la obra ilegal de un vecino. Al parecer, y según relatan
las dos mujeres, otro vecino construyó hace tiempo una
vivienda sin licencia y estas obras ilegales no sólo las
afectan a ellas, sino a un tercero de la misma calle,
Marqués Carrasco, al que “se le ha movido toda la casa”.
La propietaria de la vivienda, de planta baja, afirma que
ella y su vecino han ido a hablar con el causante de los
daños en sus viviendas para que “los arreglara”, pero
asegura que no les hace caso. “Cualquier día, el muro del
vecino se cae encima de mí”, lamenta la señora mientras
muestra el estado en que se encuentra su cocina, la estancia
en la que más ha repercutido la obra ilegal que denuncia.
Arquía explica que está “enferma” y dice que desde que notó
los primeros desperfectos en su casa, no consigue conciliar
el sueño a pesar de que toma pastillas para dormir. “Con el
viento que hace estos días -explicaba ayer-, temo que pueda
pasar lo peor y me paso toda la noche despierta”.
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