deportes - DOMINGO, 28 DE ABRIL DE 2013

CEUTA
El Pueblo
deportes@elpueblodeceuta.com

El fútbol ceutí vivió ayer otro episodio lamentable en uno de sus campos. Corría el minuto 33’ de la primera parte en el José Martínez ‘Pirri’, cuando el CD Puerto marcaba el 5-0 al Juan Carlos I en partido correspondiente a la Copa Infantil. En ese momento, varios jugadores de uno y otro equipo protagonizaron sobre el césped una pequeña trifulca que, muy probablemente, no hubiese llegado a más si no hubiese sido porque uno de los responsables del Juan Carlos I (el técnico había sido expulsado poco antes) se abalanzó sobre un jugador del Puerto y le asestó una patada en el pecho que lo tiró al suelo. Momento en el que algunos jugadores del equipo del monitor agresor aprovecharon para pisar al integrante del Puerto.

En ese momento, los responsables del campo llamaron a la Policía, algo que también hicieron algunos de los aficionados que estaban presenciando el encuentro. Sin embargo, cuando los agentes se personaron en las instalaciones del Martínez ‘Pirri’ el responsable del Juan Carlos I ya se había retirado llevándose consigo todas las fichas de su equipo, e impidiendo al colegiado poder cumplimentar el acta. Fue la propia Policía la que aconsejó al padre del menor que denunciase lo ocurrido en Comisaria.

En dicha denuncia se refleja que “en el transcurso de dicho altercado, el hijo del denunciante observa cómo uno de los responsables del equipo contrario se aproxima a este y sin mediar palabra se abalanza sobre él y le propina una patada en la zona del pecho que le hace caer al suelo, donde acto seguido, dicho varón continúa zarandeándolo al joven y propinándole golpes, siendo también pisado por varios de los jugadores durante la trifulca”. De igual modo, en la declaración también se refleja que “algunos de los adultos presentes en el lugar intervienen separando al jugador de su agresor, no obstante este profiere hacia el joven insultos en árabe y frases amenazantes tales como ‘ya te cogeré, como te vea por la calle te vas a enterar’”.

En el informe de Urgencias, donde acudió también el jugador tras la suspensión del encuentro, se calificó el diagnóstico de “agresión”, reflejándose durante la exploración física que el jugador sufría “erosión en la zona anterior del antebrazo izquierdo, dolor y edema en la mano derecha y dolor en la zona anterior del tórax”, siéndole realizadas radiografías tanto del pecho como del brazo. Este diagnóstico también fue reflejado en la posterior denuncia de la Policía.
 

“Deberían prohibir hacer de técnicos si no se tienen cursos de entrenador”

Tanto el jugador del CD Puerto agredido como el padre de este lamentaron los hechos ocurridos horas antes. Unos hechos que ambos calificaron de “evitables”, aunque para ello deberían endurecerse las medidas para que monitores y técnicos se sentasen en un banquillo. Y es que, aunque se esté hablando de equipos de categorías inferiores, el padre del jugador destacó la importancia que tienen los entrenadores para los integrantes de sus equipos. “Los jugadores no dejan de ser niños, que pueden enfadarse o reaccionar mal ante un golpe, pero para eso están los entrenadores, para afrontar de forma adecuada esos momentos y calmar los ánimos en el campo, no para alimentarlos ni para provocarlos, y mucho menos para protagonizarlos”. Por este motivo, ambos lamentaron que “cualquiera” pueda ponerse como entrenador de estos equipos de categorías inferiores sólo diciendo que es monitor, y declararon que “lo adecuado es que sólo pudiesen sentarse los técnicos que tuviesen los cursos de entrenador, porque son ahí donde te enseñan a cómo reaccionar”.