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Seis meses de prisión y una multa de 540 euros. Esta es la
pena con la que se ha conformado A.A.M. por el delito de
falsificación de documentos que ayer le llevó al banquillo
de los acusados del Juzgado de lo Penal númeor dos. El
hombre reconoció que había utilizado recetas falsas para
comprar ‘Trankimazin’, un medicamento relajante, en varias
farmacias de la ciudad hasta que el 21 de marzo de 2011
detectaron la falsificación en la farmacia de la calle
Jáudenes. El hombre pagará la multa, aunque no deberá
ingresar en prisión al carecer de antecedentes penales.
Durante la mañana de ayer también se celebró un juicio
contra tres acusados por un delito de robo. Los imputados se
conformaron finalmente a pagar una multa de 200 euros por
una falta de daños. Los hechos ocurrieron el 8 de junio de
2008 cuando dañaron los espejos de varios coches a cuyos
dueños ahora también deberán indemnizar.
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condena
