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Durante las últimas semanas se ha visto como cientos de
jóvenes estudiantes recibían en sus institutos sus bandas de
graduación, y este viernes se vivió algo parecido en el
Colegio San Daniel pero con la única diferencia que los que
se graduaban tan sólo tienen cinco años y vivieron ese
momento con especial nerviosismo ante sus padres
emocionados.
Un total de cincuenta y cuatro alumnos del colegio San
Daniel, de Educación Infantil de cinco años, recibieron el
pasado viernes la imposición de bandas con las que se les da
por superado el ciclo para abrirles las puertas de Educación
Primaria.
Decenas de familiares, en su mayoría padres y abuelos, se
acercaron hasta el salón de actos del centro para disfrutar
de este simpático y también emotivo acto, no sólo por ver a
sus hijos superar con alegría este primer ciclo de su vida
académica, sino también por el detalle y las palabras que
tuvieron las dos profesoras de estos chavales, (María y
Silvia), y la directora del centro, (Mari).
El acto dió comienzo con la llegada de los pequeños al
escenario para que uno a uno se les fuera llamando para que
la directora del centro les impusiera este primer
reconocimiento de su todavía corta vida académica.
Posteriormente, se procedió a la proyección de un video
montaje en el que las profesoras, intentaron aglutinar lo
más importante vivido por estos pequeños hombrecitos y
mujercitas durante estos tres años gracias a numerosas
fotografías que, combinadas con una música acorde para cada
momento, hicieron saltar las lágrimas a casi la totalidad de
los presentes, sobre todo cuando se agradeció a los padres
el haberles prestado durante este tiempo el mayor de los
tesoro que poseen, ‘sus hijos’.
Tras este momento, en el que los pañuelos corrían de mano en
mano y de ojo a ojo para intentar secar las lágrimas que se
resbalaban por las mejillas, los pequeños interpretaron una
bonita canción preparada para esta ocasión
Al finalizar el acto los padres también tuvieron su
reconocimiento hacia las docentes de estos chavales
entregándoles una serie de regalos para concluir la jornada
con un pequeño ágape en el patio de infantil donde los
pequeños se divirtieron gracias a un castillo hichable
montado para la ocasión.
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