sucesos - MIÉRCOLES, 26 DE JUNIO DE 2013

CEUTA
Tamara Crespo
ceuta@elpueblodeceuta.com

“Algunos” de los ocho presuntos captadores de yihadistas detenidos en Ceuta, según señala el juez, tenían intención de viajar a Siria “en breve”. Este es uno de los detalles que figuran en el auto de prisión incondicional de ‘Marquitos’, al que se considera cabecilla de la red. Su “lugarteniente” sería el otro detenido en la Operación Duna en 2006, conocido como ‘Derkia’. Ambos habrían pasado de “idear” las “acciones violentas” que se les atribuyó entonces a reclutar ‘muyahidines’.

“Algunos” de los ocho presuntos reclutadores de yihadistas en prisión desde el pasado lunes por orden del titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional tenían “intención de desplazarse en breve” a Siria. Así consta en el Auto del magistrado-juez Ismael Moreno, en el que atribuye a los implicados “funciones de mando y toma de decisiones de la infraestructura de envío” de yihadistas a este país en guerra.

Entre los detalles de la investigación que se recogen en el auto de prisión incondicional se relata que el considerado “cabecilla” del grupo, Karim Abdeselam Mohamed, ‘Marquitos’, había organizado “la próxima remesa de yihadistas”, para lo cual “procede a dar instrucciones a través de su lugarteniente, Abdelkrim Chaib, alias ‘Derkia’, a los nuevos voluntarios para que volvieran a Ceuta ante la imposibilidad de volar a Estambul”. Él mismo “buscó” los billetes “para realizar posteriormente dicho vuelo”, con destino al país desde el que la red introducía a los yihadistas en terrotorio sirio. Según los datos obtenidos por los investigadores del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y de la Guardia Civil, ‘Marquitos’ es asimismo el “acompañante continuo de los desplazados a Siria para hacer la yihad, relacionándose de forma directa o indirecta con todos los enviados y reuniéndose con ellos antes de que partan”.

‘Marquitos’ y ‘Derkia’, ambos detenidos en 2006 dentro de la ‘Operación Duna’, se consideran por tanto los dirigentes de la célula de captación desarticulada. Según señaló entonces en su auto de prisión el juez Baltasar Garzón, ambos eran también el “cabecilla” y uno de los miembros “relevantes”, respectivamente, de un grupo de 11 a los que se acusó igualmente de integración en organización terrorista. Garzón explicaba que el grupo, al que se investigaba desde 2005, pasó en 2006 “de la discusión doctrinal a planteamientos más operativos y a idear acciones violentas concretas”, que en el juicio no se lograron demostrar.

‘Marquitos’ es el detenido del que este lunes el delegado del Gobierno, Francisco Antonio González, revelaba que a pesar de no haber tenido “trabajo conocido en 39 años” vivía en una casa ilegal de más de 200 metros cuadrados en el Príncipe. Por su parte, el que se considera su ‘lugarteniente’ fue militar de las Fuerzas Armadas españolas.
 

“Cada vez eran mayores las referencias a realizar la yihad en casa”

El auto en el que el juez Ismael Moreno decreta la prisión para ‘Marquitos’, hace referencia a las 12 personas que la célula de presuntos captadores de yihadistas habrían enviado a Siria desde Ceuta. Al menos cinco de ellos habrían muerto en Siria, tras inmolarse “causando numerosas víctimas”, según los investigadores. Tres, de nacionalidad española y los primeros enviados a Siria, en 2012 (Rachid Wahbi, ‘Piti’ y ‘Tafo’), perpetraron atentados suicidas reivindicados por el Frente Yabat al Nusra. Los otros dos fallecidos son de nacionalidad marroquí pero con residencia en Ceuta.

Aunque la principal actividad de la red era esta, la captación de ‘muyahidines’, el titular del Juzgado Central de Instrucción número dos de la Audiencia Nacional señala que conforme a la investigación ralizada por la Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía y la Unidad Central Especial número 2 de la Jefatura de Información de la Guardia Civil, cada vez eran mayores sus referencias a realizar “la yihad en casa”.

De hecho, “las investigaciones efectuadas, así como las observaciones telefónicas” intervenidas en el marco de las diligencias previas “demuestran” que, tras conseguir enviar al menos seis grupos de varones, españoles y marroquíes, desde España a Siria, “dicha red yihadista internacional no sólo sigue activa y ha restablecido el envío de integristas desde Marruecos y Ceuta, sino que ha aumentado su número de objetivos, ya que la muerte de los cinco yihadistas anteriormente relacionados ha producido un efecto llamada entre los integristas de Ceuta”.