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Cruz Roja desplegó ayer un dispositivo formado por una
veintena de voluntarios para realizar un simulacro en la
playa de ‘La Ribera’. Al supuesto acudieron, además del
presidente de Cruz Roja Ceuta, José Durán, el director
territorial del Ingesa, Fernando Pérez Padilla, así como
miembros de Protección Civil, Bomberos, Policía Local,
Policía Nacional y Guardia Civil.
A las 10.40 horas, sonó la voz de alarma, una pescadora
pedía socorro en una de las escolleras de la playa de ‘La
Ribera’. La mujer, que estaba pescando, se había resbalado
entre las rocas, fracturándose la pierna izquierda y el
brazo derecho.
Rápidamente los voluntarios de Cruz Roja acudían en su
ayuda, pero el traslado no iba a ser fácil. La inestabilidad
de la escollera obligaba a llevarla a tierra en una
embarcación. Los miembros de Cruz Roja la inmovilizaron en
una camilla nido, preparada para flotar en el agua, y la
subieron a la embarcación. En apenas tres minutos, la
ambulancia ya había llegado hasta el lugar y poco después
llegaba a la orilla la embarcación con la mujer accidentada,
la cual fue atendida inicialmente por los integrantes de la
ambulancia para posteriormente proceder a su traslado.
Este fue el primero de los dos ejercicios de rescate que
realizaron ayer los miembros de la Cruz Roja en el simulacro
que organizaron en la playa de ‘La Ribera’. El incendio de
una embarcación cerca de la orilla y el rescate de sus cinco
ocupantes que pedían ser auxiliados desde el agua, completó
este simulacro. Todos ellos casos que suelen darse con
cierta frecuencia en las costas y para los que se prepara a
los socorristas.
En este segundo supuesto, uno de las cinco víctimas
presentaba una parada cardiorespiratoria, debiendo
procederse a su reanimación y posterior estabilización una
vez llegada a la orilla, encontrándose una ambulancia de
Cruz Roja en las inmediaciones de la playa.
Estos ejercicios son el completo de la formación que Cruz
Roja imparte a sus voluntarios para prepararles “ante los
distintos supuestos que pueden darse sobre todo en el ámbito
acuático”, explicaba tras el simulacro Isabel Brasero,
formadora de Socorro de Cruz Roja Ceuta. Cada año la ciudad
cuenta con un amplio y preparado equipo de socorristas en
todas sus playas que velan por la seguridad de los bañistas,
aunque Brasero recordó que el principal objetivo de los
voluntarios es “prevenir”. Así mismo indicó que lo primero
que siempre recomienda Cruz Roja es “guardar el sentido
común y hacer siempre caso al socorrista y a las banderas
que se instalan en las playas, las cuales dan las
indicaciones pertinentes con respecto al baño”. Igualmente,
inidicaba que si alguien presencia un incidente de estas
características lo primero que hay que hacer es acudir al
box de socorro ubicado en la playa, al igual que si sufre
algún problema, así como llamar al 112 o a Salvamento
Marítimo en el caso de observar un accidente en el mar.
Por su parte, el director territorial del Ingesa, Fernando
Pérez Padilla, quien estuvo presente en el simulacro con el
fin de dar su máximo apoyo a Cruz Roja, valoró la
importancia de la realización de estos simulacros al
considerar que “el entrenamiento es lo que finalmente otorga
la capacidad necesaria para reaccionar y actuar ante estas
situaciones en tiempo real”. Del mismo modo resaltó el alto
grado de estres que se soporta en este tipo de situaciones,
el cual hay que saber controlar, resaltando que gracias a
estos simulacros “se permite una respuesta rápida y eficaz
ante cualquier incidente”. Finalmente, desde el Área de
Coordinación de Emergencias-Protección Civil, (ARCE) se
valoraba que el simulacro se desarrollara de una manera muy
“ordenada y estructurada”, resaltando que “se han seguido
los protocolos adecuados, los equipos han trabajado a la
perfección y con una buena coordinación”.
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ejercicio
