PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura
Melilla

Opinión
Archivo
  

 

 

OPINIÓN - VIERNES, 30 DE AGOSTO DE 2013

 

OPINIÓN / EL OASIS

Toñi Moreno
 


Manolo De la Torre
manolodelatorre@elpueblodeceuta.com
 

Cuando el verano declina, a pasos agigantados, uno se percata de cómo la cantidad de parados que tenemos en España, apenas han dicho esta boca es mía. Los parados de cuarenta años para arriba son tantos que el día en el cual decidan dar un paso al frente no habrá manera de distraerlos con casos como el de Bárcenas, la suplencia de Casillas o convertir a Fabián Picardo, primer ministro de Gibraltar, en ese demonio con rabo al que echarle la culpa de todo lo malo que acontece en una Andalucía donde los populares se lamentan de que Javier Arenas tenga todas las papeletas para pagar con creces cuanto ha sucedido con Luis ‘El Cabrón’.

En Andalucía, por ejemplo, José Antonio Griñán ha cantado la gallina y ha renunciado a la presidencia de la Junta por culpa de los Eres, pero ha conseguido fabricarse una coraza a la medida para que la más que posible imputación de la juez, Mercedes Alaya, no le afecte lo más mínimo. Listo que es el tío que no se ha cansado de recomendar París, 1919, como el libro de cabecera que tienen que tener todos los políticos.

Andalucía, la región más grande de España, rebosante de sol, de alegría y de parados, ha situado una estrella andaluza en Madrid, para enseñarles a todos los españoles cómo, en tiempos de crisis, lo mejor que pueden hacer es ponerse a las órdenes de Toñi Moreno. La Moreno, tras atiborrarse de éxito en Canal Sur Televisión, con un programa de ayuda a los pobres, ha pasado a formar parte de TVE como antes los flamencos pasaban de la venta local a los Canasteros.

La llegada de Toñi Moreno a Madrid con su espectáculo, titulado “Entre Todos”, ha levantado una enorme expectación en el foro. Ha sido acogida tan bien como lo eran, en los tiempos del cuplé, aquellas reinas de la canción española que se presentaban en el Calderón y acababan con todo el papel durante meses. Lo de Toñi Moreno es para quitarse el sombrero: la estrella andaluza de la pordiosería ha conseguido levantar en armas a los dirigentes de Canal Sur que consideran que “Entre Todos” es un plagio de “Tiene Arreglo”. Espectáculo que conseguía una gran audiencia, recreándose todos los días en varios casos de tragedias ajenas para poder llorar a gustito y a moco tendido. Un dramón en toda regla. Con más tirón que las novelas radiadas de nuestra posguerra.

Toñi Moreno es otro producto de la televisión andaluza que se ha ido a los madriles para hacerse la fina hablando. Dicen de ella los que no la pueden ver ni en pintura. Aunque también podrían reconocer que la muchacha ha llegado a la capital del reino tras triunfar clamorosamente en su tierra. En su tierra, la mía también, gustan muchos los programas lacrimosos. Máxime en los tiempos que corren. Porque de esa manera, viendo que hay gente que lo está pasando peor que uno, se siente un no sé qué de alivio que, unido a un momento de ternura, no deja de ser estimulante.

Yo que soy muy poco dado a ver televisión y, mucho menos programas de semejante corte, debo decir que he visto el de Toñi Moreno, “Entre Todos”, en Canal Sur, cada quince días, en una barbería del Paseo de las Palmeras. Porque coincidía con mi horario de rasurarme la cabeza. Y a fe que puedo decir de ella que habla un andaluz perfecto. Una forma de expresarse a la que Pemán le hubiera dado matricula de honor. Otra cosa es que vender la miseria sea de muy mal gusto. Ya sea en Andalucía. En Madrid o en la Conchinchina. O sea, donde el viento da la vuelta.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto