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El Presidente del Sector Nacional de Enseñanza de la Central
Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) Adrián
Vivas, asegura que el curso 2013-2014 ha comenzado con
grandes incertidumbres en la comunidad educativa,
especialmente en lo que se refiere al profesorado.
CSI-F quiere denunciar que a pesar de los buenos augurios
lanzados por el Gobierno, lo cierto es que a nivel educativo
se siguen expulsando del sistema a decenas de miles de
docentes o contratándolos a media jornada, con la
consiguiente precariedad e inestabilidad laboral que este
hecho conlleva, como es el caso de Asturias (36% de
interinos a media jornada) y de tantas otras comunidades
autónomas.
Sólo en los meses de junio, julio y agosto más de 156.000
personas que trabajaban en educación han perdido la
afiliación a la Seguridad Social, es decir, han dejado de
trabajar. La inmensa mayoría, interinos a los que se les
firmó un contrato hasta el 30 de junio.
Como ya ha venido denunciando CSI-F en los últimos días, se
prevé que el curso 2013-2014 no será un curso tranquilo
debido a la consolidación de las medidas provenientes del RD
14/2012 de racionalización del gasto, al decreto de becas,
que dificultará aún más el acceso de los estudiantes a los
estudios deseados y a la probable aprobación de la LOMCE,
que además cuenta con el rechazo de todos los sectores de la
comunidad educativa y que añadirán una dificultad más a este
nuevo curso.
CSI-F denuncia que las medidas procedentes del RD 14/2012,
que nacieron como coyunturales, se mantendrán un curso más.
Estas medidas van contra la calidad de la educación y las
condiciones laborales del profesorado, generando la
masificación de las aulas (30 alumnos en Infantil y
Primaria, 36 alumnos en Secundaria y 42 en Bachillerato).
Asimismo se reducirá la plantilla de profesores a base de
aumentar la jornada laboral de quienes trabajan, en contra
de todas las recomendaciones internacionales.
En CSI-F se considera que sin un profesorado motivado y
reconocido es imposible mejorar la calidad educativa y que
tanto políticos como responsables institucionales, no deben
culpar de su nefasta gestión a lo largo de tantos años a los
planes de estudio.
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