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El presidente Vivas aseguró ayer que la Consejería de
Asuntos Sociales se hará cargo, en el programa de
prestaciones “que ya está en funcionamiento”, del copago
farmacéutico hospitalario que corresponda abonar a pacientes
locales sin medios económicos para asumirlo pese a carecer,
como Melilla, de competencias sanitarias. El presidente de
Melilla, Juan José Imbroda, quien tildó de “injusta” la
medida, ya anunció el pasado día 1 una decisión similar
respecto a este asunto.
El presidente de la Ciudad Autónoma de Ceuta, Juan Vivas,
aseguró ayer miércoles que su departamento de Asuntos
Sociales se hará cargo, en el programa de prestaciones “que
ya está en funcionamiento”, del copago farmacéutico
hospitalario que corresponda abonar a pacientes locales sin
medios económicos para asumirlo pese a carecer, como
Melilla, de competencias sanitarias.
En declaraciones a los periodistas, el líder del
Ejecutivo local no ha querido ir tan lejos como su homólogo
melillense, Juan José Imbroda, que el martes tachó de
“injusto” el nuevo sistema, que sólo ha entrado en vigor en
las dos ciudades autónomas. Al contrario, ha argumentado que
“lo importante” es que la reforma de la dispensación de
medicinas en las boticas de los hospitales “pretende
garantizar la sostenibilidad del sistema sanitario”.
“Lo esencial es eso, mantener los pilares del Estado de
Bienestar y luego, con las Políticas Sociales, atender a
quienes, por su situación familiar, lo necesiten”, ha
hilvanado el presidente de Ceuta, que no espera que esta
nueva prestación genere grandes quebrantos a las arcas
municipales. “Si hay un nivel de exigencia presupuestaria
adicional, veremos cómo se atiende”, ha apuntado.
Vivas ha explicado que la Administración local destinó el
año pasado un total de 150.000 euros a cubrir los gastos
farmacéuticos generales de los ceutíes con menos recursos y
que en lo que va de 2013 ha hecho lo propio con otros
100.000 euros. “Es un sistema que está activo, en vigor, y
que se aplicará también a las medicinas de las farmacias
hospitalarias”, ha recalcado.
El presidente sí ha descartado pedir al Ministerio de
Sanidad que cancele o postergue, como en el resto del país,
la aplicación del nuevo sistema de copago. “Lo que nos debe
preocupar es la sostenibilidad del sistema y que esa
necesidad vital esté cubierta en los casos en los que sea
preciso hacerlo con ayudas sociales, por lo que sobran más
comunicaciones”, ha zanjado.
Según los datos facilitados por el delegado del Gobierno,
durante el primer día de aplicación del nuevo copago en la
ciudad autónoma siete pacientes abonaron un total de 24
euros por los medicamentos que recogieron en la farmacia del
Hospital Universitario de Ceuta. El Ministerio ya rechazó a
principios de semana la moratoria en la entrada en
funcionamiento del programa por razones administrativas que
le pidió la Dirección Territorial del Instituto de Gestión
Sanitaria (Ingesa).
El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José
Imbroda, anunció también el pasado día 1 que su Gobierno se
hará cargo del coste del copago hospitalario que ha entrado
en vigor este martes 1 de octubre, un 10% sobre 45 tipos de
medicamentos para tratar varios tipos de cáncer, el VIH,
esterilidad o la hepatitis C, y que tendrán que afrontar los
pacientes no ingresados cuando se les dispensen ciertos
fármacos desde las boticas hospitalarias.
Imbroda ha señalado que esta medida, que de momento sólo se
está aplicando en Ceuta y Melilla al depender del Estado
mientras en el resto de comunidades que tienen transferidas
la Sanidad aún no la han empezado a poner en marcha, no le
parece justa.
Así ha declarado que le parece “injusto que los enfermos
crónicos paguen aunque sea una mínima parte”, en referencia
la medida que afecta a fármacos destinados a procesos
crónicos o graves -como varios tipos de cáncer, VIH,
esterilidad o hepatitis C- que requieren control médico y
que, hasta ahora, estaban exentos de pago.
El también senador del PP ha explicado que ya ha dado
instrucciones a la Consejería de Bienestar Social para ver
la fórmula de la asunción de este coste por parte de su
Ejecutivo, que supone un máximo de 4,20 euros por factura, y
de este modo no recaiga en el enfermo. Imbroda calcula que
la medida puede suponer un gasto para la Ciudad Autónoma de
unos 50.000 euros anuales. “La Ciudad Autónoma está para
ayudar a los melillenses y eso es lo que vamos a hacer para
evitar que recaiga en ellos este copago” ha dicho.
Máximo 4,2 euros
La decisión del Gobierno de la Nación figura en una
resolución de la Dirección General de Cartera Básica de
Servicios del Sistema Nacional de Salud y Farmacia del
pasado 10 de septiembre, publicada en el Boletín Oficial del
Estado (BOE) el día 19 del mismo mes, y establece que el
paciente deberá abonar el 10% del precio del medicamento,
siempre que no supere 4,2 euros, que es el máximo que
pagará.
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