El Fiscal de Menores, José Luis Puerta, y la responsable
del Centro de Menores Mediterráneo, Antonia Palomo,
visitaron ayer al grupo de sirios que desde el pasado lunes
están concentrados en la Plaza de los Reyes, respondiendo
así a la información recibida por parte de la Delegación del
Gobierno sobre los menores de edad que permanecen en el
lugar.
El Fiscal de Menores de Ceuta, José Luis Puerta, y la
directora del Centro de Menores Mediterráneo, Antonia
Palomo, visitaron ayer al grupo de sirios concentrados desde
el pasado lunes ante las puertas de la Delegación del
Gobierno.
Las autoridades respondieron a la información facilitada
desde la respresentación administrativa gubernamental, que
el miércoles puso en conocimiento de la Fiscalía la
situación que se viene dando con los menores de edad de los
concentrados.
Y es que en la casi veintena de concentrados en la Plaza de
los Reyes hay varios niños de corta edad y un bebé de un
mes, según pudo constatar este periódico.
Tanto el fiscal como la representante del centro de menores
estuvieron dialogando con los concentrados y todo apunta que
se están haciendo esfuerzo para que los concentrados puedan
regresar al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes,
donde antes de realizar el plante ante las dependencias de
la Delegación del Gobierno estaban internados.
Al igual que la noche del martes y miércoles, el grupo de
ciudadanos sirios durmieron a la interperie, aunque en la
tarde de ayer en sus rostros ya se notaba los efectos del
cansancio.
Desde la Delegación del Gobierno informaron que se mantienen
a la expectativa, aunque ayer ya no estaba el vehículo
policial que durante los primeros días había permanecido en
la Plaza de los Reyes en labores de vigilancia por el
plante.
Los concentrados manifestaron a este periódico que
continuarán con sus acciones reivindicativas y no declararon
nada con respecto a la conversación mantenida con el fiscal
ni con la responsable del centro de menores.
Se limitaron a decir que lo que quieren ya es marcharse de
Ceuta, insitiendo en que vienen huyendo de un país que está
en guerra civil y que no volverán al CETI.
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