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La Confederación de Empresarios de Ceuta, a través de su
presidente, Rafael Montero Ávalos ha analizado la
problemática alrededor del colapso de paquetería en Correos
a causa del Documento Único Administrativo (DUA), “no ya por
la envergadura del mismo sino por lo farragoso de este
tema”, señaló a la hora de aclarar dónde está el problema y
hacer público qué está ocurriendo.
En palabras de Montero Ávalos, hasta 2013 el DUA no había
causado ningún problema, ya que participaban varios agentes
en este sistema de documentación, incluso los particulares,
hacían su autoliquidación ”, como se recoge en el BOE: “El
declarante es la persona que efectúa la declaración en la
Aduana en nombre propio”. En Correos había una subvención de
la Ciudad Autónoma de Ceuta, de 80.000 euros para efectuar
estos trámites del DUA y “como eran Agentes de Aduanas
quienes lo hacían, se generalizó la autoliquidación. Hace
dos semanas “nos encontramos –dice Ávalos-, que Aduanas no
permiten que los particulares se autoliquiden, aunque no hay
reforma normativa en contra y se hace en Correos, donde se
ven desbordados, al contar con personal insuficiente: 3
empleados para despachar toda la paquetería y despachas el
DUA”.
“No se puede, arbitrariamente –manifiesta el presidente de
la CEE-, dejar el servicio que has de hacer y colapsar la
pequeña vía económica que tenemos. Desde que anunciamos que
saldríamos a la palestra, hoy nos confirman que sí se puede
autoliquidar. Muy curioso y en dos semanas nadie ha dicho
nada. No deja de ser llamativo”.
Otra cuestión que ha complicado el proceso de facturación y
distribución de la paquetería ha sido la interpretación de
la ley, acerca de la forma en la que presentar el documento,
sobre el que Montero Ávalos habla de “cumplimentarse por
procedimientos de impresión electrónica y, en casos
excepcionales manuscrito en letras mayúsculas”. Según la
Confederación de Empresarios, “la vía telemática es una
forma de comunicación y no de plasmar en un papel, por lo
que no han de interpretar nada. ¿Porqué se interpreta de esa
forma y siempre contraria a los intereses económicos de los
empresarios que tienen su mercancía paralizada por una
cuestión de interpretación?”, dice Montero Ávalos.
Otro punto de conflicto es el IPSI. “Ha habido empresarios
que han ido a abonar el IPSI y no sabían si podían hacerlo o
no, como tampoco si le cobraban, ya que han de darle la
documentación para poder efectuar el DUA”. De ahí que el
presidente de la Confederación de Empresarios se preguente.
“No sé si los organismos oficiales están para ayudar porque
no se ponen de acuerdo. No pueden interpretar y, sin previo
aviso, nos encontramos de sorpresa en sorpresa”.
Ahora la Agencia Tributaria ha informado a la Confederación
de Empresarios que van a celebrar unas Jornadas para ayudar
y formar a la gente a hacer el DUA. “Ahora mismo tenemos un
problema grave –dice-, ya que si sólo hay tres personas en
Correos, son insuficientes para sacar todo el trabajo
adelante”.
Por todo ello, reconoce que “las consecuencias las estamos
viendo a diario y no están las cosas para jugar de esta
forma, se podría haber hecho mejor. Hay que adaptarse a las
circunstancias y buscar mayor agilidad”. De ahí que matice
una cuestión fundamental. “No es lógico que cuando se está
en la situación actual se encuentren trabas en vez de
puentes”. Entiende que en este colapso de paquetería, “esa
mercancía es actividad económica” y apunta un dato: “Si ya
es difícil traer mercancía a Ceuta, se complica mucho para
que por una interpretación siempre salgamos perjudicados los
mismos”.
El sector del pequeño comercio es el que se ve perjudicado
por el colapso de Correos, ya que a la semana suele traer
dos o tres paquetes, debido a que la empresa grande trabaja
con un Agente de Aduanas, pero la mayoría del empresariado
ceutí es pequeño comerciante. “En paquetería de Correos es
donde se genera el DUA y quien emite la autoliquidación”.
Preguntado sobre la necesidad y ventajas de la Unión
Aduanera, Montero Ávalos declara que “parte de este problema
es no tener una misma fiscalidad que en el resto de la
península. No sé hasta qué punto es bueno que Ceuta entre de
lleno o con algunas excepciones. Es algo que tenemos
presente en la Confederación de Empresarios. Habrá que
plantearse el formar parte de la Unión Aduanera, porque
sacar mercancías de aquí es una verdadera odisea y hay que
pagar IPSI cuando aún no se ha vendido esa mercancía”.
Sobre el pago del DUA, Montero Ávalos alude a que “un libro
que cuesta 14 o 18 euros, si ha de pagar 30 entre DUA y
transporte, ¿a qué precio sale un libro? Es absurdo.”
En cuanto a los código que hay que cumplimentar para la
autoliquidación, un error supone una multa elevadísima de
4.000 o 5.000 euros, por lo que quienes hacen sus
autoliquidaciones prefieren pagar 18 o 20 euros a una Agente
de Aduanas, antes que sufrir esa sanción tan desorbitada.
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“No se puede hacer con las terrazas el corta, pega y
colorea”
Montero Ávalos critica la
Ordenanza que recoge contenidos de varias de Cádiz, Sevilla
o Málaga y pide mayor flexibilidad en la aplicación de la
normativa. Los hosteleros no están contentos con la
Ordenanza de terrazas. Según informa la Confederación de
Empresarios, “no están dando licencias con la agilidad que
los propios hosteleros quisieran. Los técnicos dicen que han
de aplicar lo que marca la normativa y ésta no es flexible.
Debería decir “sillas de color claro y no blanco. Todo está
limitado al milímetro y no todas las calles son iguales en
Ceuta”. Por ello reclama que se hagan distintas categorías
en función al tipo de vía, en donde se instala la terraza.
“Mantengo –dice Montero Ávalos-, que el problema no está en
los hosteleros sino en la normativa. Yo le he dicho al
consejero que hablamos de 100 o 115 terrazas y que se podría
haber visto caso por caso, ya que cada una tiene un problema
distinto”. En su opinión no se puede hacer con las terrazas
“el corta, pega y colorea”, en referencia a que la Ordenanza
contiene normas recogidas de otras de Sevilla, Málaga y
Cádiz. Así, la ordenanza es inútil”.
Para Montero Ávalos el problema puede surgir el 2 de enero,
cuando se presente un problema grave con la entrada en vigor
de la normativa. “Auguro –dice-, que la mitad de las
terrazas van a desaparecer. Es un problema en una ciudad
propicia para ver un buen ambiente en la calle. ¿Se va a
coartar? Pese a los muchísimos días de sol que tenemos y la
buena temperatura, puede ocasionar un grave perjuicio al
sector”. Pese al carácter transitorio que, en la actualidad
tiene la norma de terrazas, ya se ha dado el caso de algún
Decreto de cierre. “La culpa no es de los técnicos, ya que
ellos aplican lo que los políticos deciden”.
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