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e.p./ceuta.- No ha concedido ni un mínimo resquicio a la
duda. La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional de
España no cree en los argumentos esgrimidos por los
cameruneses que recientemente han solicitado asilo en
nuestro país alegando que sin perseguidos por razones de su
identidad sexual. Se confiesan homosexuales y explican que
son expulsados de sus hogares, no aceptados por la sociedad
y perseguidos por las autoridades de Camerún.
A la Audiencia Nacional le resulta chocante, y así lo ha
explicado en sus sentencias, que todos hayan entrado a la
vez en la misma época del año y siguiendo la misma ruta
hasta las ciudades de Ceuta o Melilla vía Marruecos. La
Audiencia concluye que necesita datos y pruebas porque todos
los casos son idénticos, es decir, se repiten “las mismas
alegaciones en relación a su orientación sexual y a ser
padres de un hijo”. En este sentido, lo que pretende la Sala
de lo Contencioso es que los cameruneses perseguidos
acrediten la situación que denuncian.
En concreto, todas las peticiones se produjeron entre los
años 2006 y 2008 respondiendo a los patrones mencionados. En
este sentido, la Audiencia Nacional no suele conceder el
asilo en este tipo de situaciones. Sí lo hizo por última vez
en el año 2003. El afectado, de 32 años, se instaló en
Sevilla tras haber demostrado la persecución y
discriminación que sufría en su país de origen, Argelia .
También se concedió el asilo a dos mujeres subsaharianas en
febrero del año pasado porque eran perseguidas en sus países
de origen, Camerún y Guinea. Primero se instalaron en la
Península y actualmente residen en Ceuta. Aquí han podido
comenzar una nueva vida partiendo de cero y sin miedo a ser
perseguidas.
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