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La intención puesta de manifiesto por la Delegación del
Gobierno para la recuperación del litoral, lo que podría
conllevar el derribo de algunas edificaciones en la barriada
de Benzú ha generado, aparte de un intenso debate político
entre Caballas y el delegado del Gobierno, las protestas
vecinales.
Así, este periódico ha podido comprobar como las protestas
han quedado plasmadas en forma de pintadas, que cubren la
mayoría de muros y fachadas de la carretera que conduce
hasta la barriada. En ellas se ponen de manifiesto la
oposición al derribo de las viviendas, así como en otras se
explica que las familias no tienen para comer y encima las
pretenden desalojar de sus viviendas, en las que en muchos
casos llevan habitando más de dos o tres décadas.
Todo este proceso se inició a mediados del mes de diciembre
pasado, cuando desde la Delegación del Gobierno se empezaron
a enviar cartas a familias residentes en la citada barriada
en las que se les comunicaba la apertura de expedientes para
la recuperación posesoria sobre las viviendas al entender
que estás se encuentran en zona de Dominio Público
Marítimo-Terrestre.
Los expedientes mencionados son el fruto de informes
realizados por el Area de Fomento de la Delegación relativos
a la existencia de edificaciones dentro del deslinde del
dominio aprobado en 1985 entre la escollera de ampliación
del puerto en Playa Benítez y la frontera con Marruecos.
Son muchos los casos que se dan de familias que están
inscritas como residentes en el lugar en el padrón, así como
contarían con servicios tan esenciales como luz, agua,
aparte de abonar, también en muchos casos, los impuestos
locales de viviendas.
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protesta
