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El día después del luctuoso suceso ocurrido al filo de la
media noche del jueves estuvo marcado por la repulsa y por
la indignación ante la muerte de un joven de tan sólo veinte
años, que hacía poco que se había comprometido, y que
esperaba terminar sus estudios.
Pero también era el día de acudir hasta dependencias
policiales en busca de conocer como marchan las
investigaciones para esclarecer lo sucedido y dar y detener
con los autores de tan terrorífico acto.
El mutismo fue la tónica general en el seno de la Jefatura
Superior de Policía de Ceuta, que ayer, a preguntas de este
diario, declinaron hacer ningún tipo de comentarios al
respecto y desvelar dato alguno sobre como van las
investigaciones.
El hecho de que los autores de los disparos, al parecer dos,
realizaran los mismos con los que acabaron con la vida del
joven Munir con la cara tapada hace más complicado el
asunto, aunque no es algo novedoso en los numerosos tiroteos
que se han registrado en la barriada. Es más, es habitual
que viajen en una motocicleta y que vayan con la cara
siempre tapada, una actitud de cobardía para poder acometer
un acto de semejante magnitud.
Pero si bien la Policía Nacional, que es la que lleva el
caso no facilita pista alguna ni tesis de trabajo, la que si
está tomando cada vez más cuerpo es la de que los pistoleros
confundieron al joven fallecido con otra persona. Para que
se entienda mejor, los autores de los disparos podrían haber
confundido al joven con otra persona que podría ser su
objetivo y a la que vinieron a buscar para tirotearla. Y
esta teoría oficiosa se sustenta en el carácter sencillo y
abierto del fallecido y como muchos dijeron ayer “era una
muy buena persona”.
Los impactos de bala mortales recibidos por el joven, según
los datos facilitados desde el hospital universitario, uno
en el pecho y otro en un tobillo, propiciaron que llegase
con el útimos suspiro hasta el centro hospitalario, donde
casi de inmediato falleció.
Este diario intento ayer conocer, aunque sin éxito, que día
será cuando se celebre el acto del sepelio, que a buen
seguro será una manifestación de duelo y de dolor para toda
una barriada como es el Príncipe.
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Nueva víctima en el Príncipe
Desde Caballas queremos manifestar
públicamente nuestra preocupación e indignación por los
episodios de violencia e inseguridad ciudadana que está
afectando de forma “cotidiana” a nuestra ciudad. Queremos
condenar esta escalada de violencia desconocida en nuestra
ciudad que tiene a toda la Barriada del Príncipe
atemorizada, sumida en el desasosiego y paralizada por el
miedo. Sumarnos desde Caballas a la indignación ciudadana y
denunciar la frialdad y el desprecio que desde la Delegación
del Gobierno sufre la barriada en particular, y a la ciudad
en general. Denunciar el olvido que ha sufrido esta barriada
durante años por los reponsables políticos de los diferentes
gobiernos, quienes únicamente han aportado como solución,
discursos grandilocuentes vacíos de acciones concretas.
Finalmente, trasladar a la familia nuestro profundo pesar y
nuestras condolencias a todos los vecinos de la barriada,
quienes también son víctimas de este sinsentido.
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Tragedia en el Principe Alfonso
