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Después de tres años sin poder disfrutar de un Viernes Santo
completo debido a las inclemencias meteorológicas, este año
la ciudadanía de Ceuta no dudó en lanzarse a la calle
deseosa de vivir como se debe y merece el Viernes Santo.
La tercera hermandad en iniciar su procesionar por las
calles ceutíes y sentir el calor del público durante la
realización de su protestación pública de fe fue la Cofradía
de Penitencia del Santísimo Cristo de la Expiración, María
Santísima del Amor y San Juan Evangelista.
Al igual que todas las hermandades del Viernes Santo, la
Cofradía de la Expiración también adelantó su hora de
salida. A las 20.00 horas, la Cruz de Guía de la Hermandad
marcaba el inicio del procesionar de esta hermandad, la
única que todavía mantiene una de sus pasos a ruedas, el que
porta la imagen del Santísimo Cristo de la Expiración.
El paso de misterio del Santísimo Cristo de la Expiración
salía del templo seguido muy de cerca de María Santísima del
Amor quien se encontraba arropada bajo su palio por San
Juan. Los costaleros de María Santísima del Amor, con un
andar más propio de un paso de misterio que de un palio,
avanzaban al ritmo de la música interpretada por la
Agrupación Musical de Nuestro Padre Jesús Caído y Virgen de
la Amargura.
Una vez realizada la carrera oficial se dirigió por el paseo
del Revellín hasta la calle Ingenieros, Muñoz Castellanos y
Paseo Colón, para desde ahí dirigirse por Dean Navarro
Acuña, Víctori Goñalons y Jáudenes hasta la Santa Iglesia
Catedral, donde realizaron Estación de Penitencia para
finalmente dirigirse con paso firme hasta el Santuario de
Nuestra Señora de África para recogerse.
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