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La directora del Parque Marítimo del Mediterráneo, Kissy
Chandiramani, asegura que la solución para incrementar la
afluencia de gente a estas instalaciones no pasa por bajar
los precios de la entrada, como así lo propusieron el pasado
miércoles los empresarios que tienen una concesión en este
recinto y que salieron a la palestra para denunciar una
caída en sus ingresos de hasta el 50% debido a la falta de
bañistas. Sin embargo, Chandiramani explica que los costes
del mantenimiento del parque imposibilitaría rebajar la
entrada. “Necesitaríamos más ingresos por parte de la Ciudad
Autónoma”, señala y recuerda que eso significaría que más
dinero de los impuestos de todos los ceutíes irían a parar
al Parque Marítimo.
No obstante, la directora aclara que ahora no se podría
acometer una rebaja del coste de la entrada porque la
empresa tiene un presupuesto anual que hay que cumplir y
sobre la posibilidad de reducir el precio para el próximo
año, señala que no se ha planteado en el Consejo de
Administración. Chandiramani entiende que esta no es la
solución y que hay que buscar otras propuestas. Como
alternativa, la directora del Parque Marítimo hace
referencia a los convenios con entidades como la Federación
Provincial de Asociaciones de Vecinos (FPAV), Cruz Roja, la
Casa de la Juventud, el área de Mayores o el Instituto Ceutí
de Deportes para ofrecer la entrada gratuita en determinados
días. “Con estos acuerdos fomentamos que los concesionarios
tengan más clientes”, apunta Chandiramani para añadir que
esto no supone ingresos para el parque, pero sí un gasto que
asumen para favorecer a los empresarios.
Sobre el resto de peticiones que han hecho los
concesionarios para que, entre otras cosas, el parque abra
sus puertas hasta noviembre, Chandarimani señala que no
tienen constancia formal, sino que se ha enterado a través
de los medios de comunicación. Además, informa de que ante
la propuesta que los empresarios le habían hecho en
reuniones anteriores de abrir hasta noviembre, a estos se
les ofreció la posibilidad de compartir los gastos de
mantenimiento extraordinarios que supone mantener el parque
en funcionamiento. “La idea ha quedado sobre la mesa y no
nos han contestado”, dice Chandiramani para añadir:
“Depender de la climatología es complicado y no podemos
arriesgarnos a ampliar la temporada para tener pérdidas”.
La reunión del pasado miércoles, según explica la directora,
se convocó de manera informal y a ella no acudieron todos
los concesionarios. Además, la directora afirma que algunos
empresarios le han trasladado que no están sufriendo
pérdidas, como así manifestaba el pasado miércoles el
presidente de la Asociación de Concesionarios, Francisco
Manuel Blanco. “Hay información contradictoria”, alega.
Chandiramani manifiesta que el pasado mes de mayo se vendió
el doble de entradas que el año anterior y que en junio
también se ha superado la cifra registrada en 2013. Sin
embargo, en julio ha caído el número de bañistas y la
directora recuerda que esta es la tendencia habitual que se
registra en Ramadán. “La mitad de la población ceutí cambia
sus hábitos, no vienen al parque y lo notamos”. Mientras el
número de abonos ha caído un 4%, una caída que se está
produciendo durante los últimos años de forma paulatina
debido a la crisis, según apunta. Por último, la directora
del Parque Marítimo señala que tiene su puerta abierta para
atender a los empresarios y buscar alternativas con las que
incrementar la afluencia.
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En Tenerife se cobra la hamaca a 2,5 euros
Los concesionarios del Parque
Marítimo alegaron el pasado miércoles que en Tenerife las
entradas a las instalaciones que diseñó César Manrique,
similiares a las de Ceuta, tienen un precio de 2,5 euros.
Algo a lo que Chandiramani responde que allí se paga además
2,5 euros por hamaca y tres por sombrilla. “No es cierto que
sea más barato”, alega.
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Dos años con los mismos precios de entrada
La directora del Parque Marítimo,
Kissy Chandiramani, explica que los precios de las entradas
y los abonos llevan dos años sin experimentar ninguna subida
y que la última vez que se hizo fue para actualizar los que
se habían fijado en 2008. “Los precios de los servicios han
subido y tenemos que amortizar la apertura de las
instalaciones”, señala la responsable del Parque Marítimo.
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Abrir hasta noviembre, una posibilidad cara
Para el Parque Marítimo abrir
hasta el mes de noviembre es una posibilidad cara, según
explica su directora, y que queda expuesta a la climatología
para lograr beneficios. Por ello, ante la propuesta de los
empresarios de ampliar la temporada de baño, desde la
dirección se les ha propuesto compartir gastos como los de
los socorristas o la limpieza.
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