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Es comprensible que, los partidos
políticos, sobre todo cuando se trata de rebañar votos,
piensen que la estrategia de “proponer” sea la más adecuada,
de hecho, si no hay “propuestas” es como si la oposición
dejara de oponerse y perdiera en parte su razón de ser. Pero
en todo hay que proceder con cautela y con un cuidado
exquisito para no herir a nadie. Y que no suene a perorata
demagógica lo que ha venido siendo durante décadas una
tragedia que ha alcanzado a muchas y contra la que, desde la
Ley de 2005, tan suplicada, tan solicitada, tan
imprescindible, se lucha cada vez con mayor contundencia.
Que a estas alturas se descuelgue con la solicitud de un
“Protocolo de Actuación contra la violencia de género”
cuando ese Protocolo existe y se aplica rigurosamente desde
el año 2005 por los Cuerpos de Seguridad del Estado muchos
de cuyos miembros se han especializado en este tipo de
delitos, con juzgados de Violencia específicos para las
mujeres y salas para las víctimas y toda la sociedad
española, esta vez sin fisuras, se encuentra volcada con
este tema, el que los socialistas vengan ahora con que “se
presente y active, en la mayor brevedad” el ya existente
Protocolo que precisamente fue uno de los logros más
esplendorosos de nuestros legisladores, todo ello suena a
que han estado perdidos en alguna isla del Pacífico como
Robinsones Crusoes versión hispana y se han perdido los
avances que la sociedad ha conseguido en esta materia. El
Protocolo está, lo siento. Y se aplica con el mayor rigor
por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Está y se aplica en el ámbito sanitario en los hospitales
donde los facultativos tienen que lanzar una alerta si
sospechan de la existencia de maltrato. Existe y en los
Juzgados de Violencia de Género se multiplican las órdenes
de alejamiento y estos juzgados, que cuentan con jueces y
fiscales especializados actúan coordinadamente con la
Policía para que los alejamientos se cumplan y las mujeres
estén protegidas. Más nuestro sistema penitenciario que
obliga a los maltratadores que se encuentran en las cárceles
a seguir cursos específicos de reeducación. ¿Qué vienen
ahora a inventar estos socialistas?. Todo está inventado y
todo se está llevando a cabo de manera impecable ¿Una “Mesa
por la Violencia de Género”? Más cargos, más designaciones y
más instituciones, la “Mesa” son los policías, los jueces,
los fiscales, los médicos y la sociedad entera. La “Mesa”
son las campañas institucionales, escalofriantes y
realistas: “Si te pega no te quiere” La “Mesa” son los
maestros que, desde las escuelas, tratan de educar a las
generaciones del futuro para que sean mucho mejores que las
del pasado. Aquí estamos todos implicados y los socialistas
parece que no se han enterado.
Ahora bien… Lo auténticamente necesario y la gran laguna
dentro de la Violencia de Género, la asignatura pendiente
que la sociedad española no ha aprobado excede con mucho a
las actuaciones policiales y judiciales. Si la secretaria de
Igualdad hubiera propuesto la obligatoriedad de un
diagnóstico psiquiátrico del maltratador inmediatamente
posterior a su detención para averiguar si padece algún tipo
de trastorno mental o de conducta (de hecho lo padecen) y si
con tratamiento médico puede superarlo o es congénito y no
tiene curación aunque se pueden atenuar los síntomas y esos
individuos son seguidos por psiquiatras que determinen sus
factores de riesgo y peligrosidad o posibilidad de
reincidencia, si se pone el acento en la psiquiatría
entonces ese tipo de propuesta, venga de quien venga, es
digna de admiración y aplauso. No podemos olvidar que, en
atenciones de Salud Mental, la mayoría de los países
occidentales nos dan “sopas con honda”. Y no hablo ya de los
EEUU y de Rojas Marcos, que fuera Director General de Salud
Mental de Nueva York (los americanos son muy civilizados y
cuidan sus cerebros) o mejor, sí voy a hablar de una
entrevista concedida por Rojas Marcos al que se le preguntó
si todos los maltratadores, con su narcisismo, violencia y
crueldad eran enfermos mentales, el famoso psiquiatra
respondió que puede que la mitad de ellos sí, pero que
existe lo que el doctor llama “temperamento perverso” es
decir una persona que es mala porque lo es, como se puede
ser moreno o tener los ojos azules y con esos es mucho más
difícil obtener resultados. Eso nos lleva a considerar que
existe el maltratador enfermo mental, el maltratador
perverso y el nexo común entre ambos y es que los de las dos
categorías se pueden calificar de auténticos hijoputas y ahí
nos entendemos todos.
¿Que quiere aportar el PSOE algo necesario al tema de la
Violencia de Género? Que se dirija a los avances en
psiquiatría y que se pare en la atención a las víctimas más
indefensas que son los niños en un país como España en el
que, la psiquiatría infantil, aún está en mantillas y eso es
ya mucho decir.
Pero eso no es todo, porque la propuesta tal vez más
sorprendente es la de el “Plan de Actuación Específico
contra la Violencia Sexual” ¿Sabe el PSOE el estricto
protocolo de los hospitales en casos de violencia sexual,
léase violación o abusos sexuales? ¿Piensan que la Policía y
la Guardia Civil no se encuentran lo suficientemente
capacitados para atender a las víctimas de agresiones
sexuales? ¿Desconocen los brillantes logros de los
profesionales de la Policía Científica en sus laboratorios?
¿No consideran a nuestros jueces, fiscales y equipos
técnicos de los Juzgados lo bastante preparados como para
hacer frente a este tipo de delitos, especialmente
repugnantes y duramente penados en nuestras leyes? ¿Ignoran
que, en las cárceles, los violadores y agresores sexuales
tienen que permanecer aislados porque, en el código moral de
los reclusos que tienen madres, esposas e hijas, un violador
es un apestado al que hay que castigar con dureza y
represaliar? ¿Qué “Plan Específico” van a llevar los
políticos de una “mesa” que no esté ampliamente contemplado
en nuestras leyes y en la aplicación de las mismas? ¿Qué
saben quienes no son profesionales de la Justicia, la
Policía, la psiquiatría y los centros penitenciarios de
planes “específicos” para los delitos sexuales que son una
materia cuyo tratamiento ya está en manos de los mejores
profesionales y expertos? ¿O es que piensan que cualquier
profano con ambiciones políticas se encuentra
profesionalmente capacitado para adoptar iniciativas que
pasan al ámbito de los tres poderes? ¿De qué ignoto planeta
han aterrizado los socialistas con su ovni electoral? Y
estos temas, serios, lacerantes y que afectan profundamente
a toda la sociedad que se encuentra dolorosamente
concienciada, ni pueden ni deben ser objeto de debates
demagógicos ni de palabrería, por muy buenas intenciones que
exuden. Estos asuntos tienen que ser tratados y estudiados
por expertos y por los mejores profesionales, que en España
en general y en Ceuta en particular los hay. Que pidan más
medios para los peritos forenses y para todos aquellos que
han de lidiar con los delitos, que pidan todos los medios.
Pero que dejen a los profesionales trabajar y no anden
enredando, son temas demasiado trascendentes y los
experimentos, mejor con gaseosa.
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OPINIÓN / ANALISIS
