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Un total de 1.693 alumnos de diez centros de secundaria han
participado en la última edición del concurso escolar ‘Clase
sin humo’, una acción del Plan Integral de Tabaquismo, de la
Consejería de Sanidad, dirigida a niños de 12 a 14 años, es
decir, de primero y segundo de ESO, con el objetivo de
retrasar la edad de inicio en el consumo de tabaco y
estimular la prevención del tabaquismo reforzando el
carácter voluntario de la decisión, el compromiso de grupo,
la confianza en uno mismo y en los otros y la recompensa, en
forma de premio, como estímulo.
La clase ganadora de este curso es el 1ºF del Instituto de
Enseñanza Secundaria Clara Campoamor, que fue el afortunado
en el sorteo ante notario que decidió al grupo vencedor de
entre todos los que llegaron a la final. El premio: un
campamento multiaventura en el Complejo Rural Miguel de
Luque
La primera edición de Clase sin humo fue en 2005. Entonces
participaron siete clases, que sumaban 174 alumnos. En la
última edición han participado 63 clases de diez centros,
que son los siguientes: Clara Campoamor, Luis de Camoens,
Almina, Siete Colinas, Abyla, Beatriz de Silva, Severo
Ochoa, San Daniel, San Agustín y La Inmaculada. A la final
han llegado 52 clases, que esto días reciben la visita de
las técnicas de Sanidad que trabajan la prevención en el
ámbito escolar, Caridad Blanco y Lola Naranjo, quienes les
entregan una camiseta con el logo del certamen.
Este concurso nació fruto de la coordinación e implicación
de los ministerios de Sanidad y Educación, por parte de la
Administración central, y la Consejería de Sanidad y
Consumo, mediante el Plan Integral sobre Tabaquismo, por
parte de la Ciudad de Ceuta. Consiste en que toda la clase
se comprometa a no fumar por un periodo no inferior a cinco
meses y en que cada una elabore un eslogan sobre prevención
del tabaquismo que la identifique como grupo.
‘Clase sin humo’ mueve a los participantes a decidirse, de
forma voluntaria, por un estilo de vida saludable e
incompatible con el consumo de tabaco. Está dirigido a
escolares de entre 12 y 18 años, edades decisivas para
trabajar la prevención del tabaquismo. Según la Organización
Mundial de la Salud, está disminuyendo la edad de los
jóvenes que encienden sus primeros cigarrillos y aumentando
la tasa de jóvenes fumadores.
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