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El Pleno de la Asamblea celebra
hoy una sesión extraordinaria de carácter organizativo de
gran importancia, que marcará el desarrollo de la
legislatura, ya que se fijará la periodicidad de las
sesiones plenarias y se crearán las comisiones informativas
para este nuevo mandato. En este sentido, teniendo en cuenta
que los Plenos eran ya maratonianos en la pasada
legislatura, para la que ahora comienza, con la entrada de
dos grupos más en la Asamblea, parece razonable que se
realicen dos sesiones plenarias al mes, una de proposiciones
en la que se sometan a consideración todas las propuestas
presentadas por los Grupos Políticos y otra de fiscalización
en la que el Gobierno responda a las interpelaciones
presentadas.
Además, otro aspecto importante
será conocer las resoluciones del presidente de la Ciudad en
materia de delegaciones y nombramientos, después de los
rumores que giran ahora en torno a los nombres de aquéllos
que ocuparán las asesorías creadas para la presente
legislatura.
No menos importante será la
constitución de las nuevas juntas generales de las diez
empresas públicas de la Ciudad Autónoma, que quedarán
compuestas por los actuales 25 diputados de la Asamblea.
Tras la constitución del máximo órgano de las sociedades, el
orden del día de cada una de las empresas lo compone el cese
de los anteriores miembros del consejo de administración y
el nombramiento de sus nuevos componentes, que designarán
los grupos políticos.
En definitiva, una sesión
plenaria la de hoy que aclarará muchos aspectos y mostrará
si el espíritu de consenso que todos aseguran tener es una
realidad constatable o, como dice la canción, es solo puro
teatro.
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OPINIÓN / EDITORIAL
