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Coalición Caballas denunciaba ayer
una situación que no deja de ser, a parte de actos
vandálicos, una falta de respeto hacia los difuntos y sus
familiares. A través de la información vertida por el
partido liderado por Mohamed Alí se ha sabido que el
Cementerio de Santa Catalina está siendo víctima de
continuos robos y destrozos. Hay que ser muy despreciable y
sinvergüenza para no respetar ni las tumbas de los muertos.
Esta situación, tal y como dice Caballas, no tiene que
seguir produciéndose y todas las autoridades competentes en
el asunto deben tomar cartas en el asunto a la mayor
urgencia posible. No es el primer caso de estas
características ya que antes de denunciarse estos hechos en
el cementerio cristiano de Santa Catalina, también se
denunciaron grandes destrozos y robos en el cementerio judio
de Ceuta.
Esta situación debe ser
erradicada a la mayor brevedad, buscando las medidas que
sean necesarias con el fin de evitar que las familias de los
difuntos tengan que sufrir esta falta de respeto,
ocasionándoles un dolor que no es recompensado de ninguna de
las maneras. Es necesario que no pase ni un minuto más sin
que se comiencen a poner en marcha las medidas que sean
necesarias para acabar con estos actos vandálicos y emplazar
a los agentes tanto locales como nacionales a investigar
estos hechos con el fin de esclarecer y detener a los
autores de los mismos. No se puede consentir ni un segundo
más que estos hechos se sigan produciendo y hay que comenzar
a poner en marcha medidas que puedan servir para disuadir a
estos sinvergüenzas que se dedican a hacer daño como
diversión, sin tener en cuenta el sufrimiento de las
familias afectadas.
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OPINIÓN / EDITORIAL
