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Un joven ceutí, Cándido Mustafa S.K., se declaró ayer
culpable de un robo con intimidación y aceptó cumplir una
pena de un año de prisión que le fue impuesta por el Juzgado
de lo Penal numero 1 de Ceuta.
La vista oral contra esta persona se centraba en hechos que
tuvieron lugar el 20 de enero de este año, cuando una joven
fue asaltada por dos individuos en los Jardines de la
Argentina. Ella hablaba con su padre por teléfono cuando dos
personas se le acercaron amenazadoramente. Una de ellas, el
joven que ayer fue juzgado y que habitualmente trabaja en la
península como ‘temporero’, le habría mostrado un objeto que
ella identificó como una pistola. Acto seguido le arrebató
el teléfono móvil de su propiedad y que la chica estaba
utilizando, cortó la comunicación que la joven mantenía con
su padre y se dio a la fuga.
Durante la fase inicial de la vista oral, el acusado indicó
que en el momento de los hecho se encontraba en la localidad
madrileña de Villarejo de Salvanés, en plena recogida de la
aceituna.
Dijo que se encontraba en un piso propiedad de otro
temporero y que este le alquilaba una habitación. El joven
no pudo acreditar con documentos ni el hecho de que
estuviera trabajando en el campo ni tampoco el alquiler de
la habitación, ya que todo se hacía de forma ilega.
Admitió que en años anteriores se había dedicado a
actividades delictivas, concretamente “a robar”, junto con
otro compañero. Dijo que esta persona se le parece mucho
físicamente y que de hecho le había costado dicho parecido
algunas detenciones por parte de la Policía.
La Fiscalía le pedía cuatro años y el joven se derrumbó
después de que la víctima, que intervino por
videoconferencia desde la península, le reconociera sin
ningún género de dudas, al igual que ya ocurriera en Ceuta
en una rueda de reconocimiento.
Finalmente, entre sollozos, se declaró culpable y se
conformó con una pena final de un año de prisión, que tendrá
que cumplir ya que tiene antecedentes no cancelados.
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