DEPORTES - MÍERCOLES 23 DE DICIEMBRE DE 2005

A pesar de que la Asociación Deportiva Ceuta se ha marchado de vacaciones de Navidad con una balsámica victoria sobre el Conquense (2-0) en el último partido del año, y por extraño que pueda parecer, Alfonso Sánchez considera que el parón invernal ha llegado en el momento más inoportuno. Y es que el interior izquierdo del cuadro caballa, que habría preferido seguir con la rutina de la competición, tiene hambre de fútbol y le hubiera gustado saciarla ante el Talavera y el Díter Zafra, los dos próximos rivales que le restan al conjunto entrenado por Ramón María Calderé para completar la primera vuelta en el grupo IV de Segunda División B.

“Afrontamos estos dos partidos del año nuevo con mucho optimismo. Siendo sincero, debo reconocer que cuando mi equipo consigue una victoria lo que prefiero es jugar de inmediato el siguiente encuentro. Más aún por la situación que atravesamos en tabla clasificatoria -decimocuartos con 19 puntos y a uno sólo de la promoción de descenso-, soy partidario de calzarnos las botas ya. El triunfo, que siempre es bienvenido, nos ha llegado con el parón navideño de por medio, aunque lo suyo habría sido jugar a la semana siguiente contra el Talavera. Vencer al Conquense nos ha dado mucha moral y si este domingo nos hubiésemos enfrentado al Talavera seguro que lo aprovechamos para sacar otros tres puntos. Estas vacaciones no nos han llegado en buen momento”, afirma Alfonso, quien añade que “contra el Talavera y el Díter Zafra estamos obligados a sacar los seis puntos, porque sigo pensando que el Ceuta es favorito en todos los partidos que vaya a disputar”.

El centrocampista, que frente al Conquense entró desde el banquillo en el segundo tiempo para sustituir a Moisés en el flanco izquierdo, se congratula porque se reencontró con el gol. “Podemos darnos por satisfechos con nuestro trabajo y en lo personal, después de estar toda la semana tocado en la espalda, doy gracias a Dios porque metí un gol y ayudé al equipo a conseguir el triunfo”, señala el futbolista, que firmó el segundo y último tanto del Ceuta.

Sobre el partido, Alfonso considera que “no hubo color”. “El Ceuta fue muy superior al Conquense, que se presentó como uno de los equipos más flojos que pasó por el Murube. Nosotros estuvimos bien plantados y no atravesamos situaciones de peligro. Además, lo que nos ha faltado durante casi toda la Liga, la suerte, cambió y nos pitaron un penalti a favor nada más empezar el partido. El 1-0 dejó tocado al Conquense y con el segundo gol lo terminamos de hundir”, indica.

El jugador caballa, al igual que apuntó Calderé, dedica esta “victoria balsámica” a toda la ciudad. “Se la debíamos a todo Ceuta. La gente estaba respondiendo bien a pesar de que no estábamos teniendo suerte. Estos tres puntos le han sentado bien a todo el mundo, incluso a los que no quieren al equipo. Todo el mundo quiere que el Ceuta mire hacia arriba y salga de esas posiciones comprometidas”, puntualiza.

Por último, el extremo alabó el trabajo que realizó su compañero David Franch como improvisado delantero centro. “Me encantó. Trabajó a destajo, defendió y se notó su presencia en punta. Fue un incordio para la defensa del Conquense y, con lo grandote que es, se movió muy bien. Nos abrió espacios, incluso hizo desmarques, que sorprende por su envergadura. Seguro que al rival le sorprendió encontrarse con un delantero grande que consiguió encontrarle las cosquillas”, concluye.
 

“Aún sigo con dolores en la espalda, pero me encuentro mucho mejor”

Alfonso Sánchez hizo un esfuerzo el sábado pasado para estar a las órdenes de Ramón María Calderé. Y es que el interior zurdo disputó unos minutos con la AD Ceuta -suyo fue el segundo gol caballa-, a pesar de que no pudo entrenar durante toda la semana por un pinchazo muscular en la espalda. El sacrificio dejó algunas secuelas al término del partido, aunque no parecen revestir excesivo peligro. “Aún sigo con dolores en la espalda y me resulta bastante incómodo, pero me encuentro mucho mejor. Después del encuentro me sentí bastante incómodo y, de hecho, sigo aplicándome los relajantes musculares que me recomendó Alberto León, nuestro fisitorapeuta”, afirma el medio, quien estuvo “toda la semana sin entrenar por un tirón en la espalda, aunque pude jugar un rato”.

Por otra parte, Alfonso dice que se encuentra tan a gusto jugando de lateral zurdo como de interior. “Son posiciones diferentes: en una intentas que no te metan gol y en la otra crear ocasiones. Llevo toda mi vida jugando de interior y si he llegado a algo en el fútbol, en Segunda División, ha sido jugando en esa demarcación, aunque también me encontré cómodo de lateral. Si tengo que jugar atrás o alante no importa. Todo lo que sea en beneficio del Ceuta, bienvenido sea”, finaliza.