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OPINIÓN - SÁBADO 24 DE DICIEMBRE DE 2005

 

OPINIÓN / EL OASIS

La memoria del metijón
 


Manolo De la Torre
manolodelatorre@elpueblodeceuta.com
 

La llamada del metijón para felicitarme las fiestas no me sorprende. De sobra sé que es más cumplido que un luto alicantino. Tampoco me extraña que comience recordándome algo que ocurrió hace ya varios años, un día 24 de diciembre.

-¿Qué recuerdas de aquella noche tan señalada en la cual te pudieron matar en el pasaje de Pedro de Meneses?

-Muchas cosas; y, como comprenderás, nada buenas.

-¿Es cierto que la mañana de ese día estuviste tomando una cerveza en el Clipper con el editor de El Faro?

-Sí; allí estuve. Y me preguntó qué si por la tarde iba a recorrer la ciudad, como era habitual cada 24 de diciembre, para hacer un reportaje y así darle vida a un periódico que el día 26 carecía de vida.

- ¿Tú trabajabas todos los 24 desde que entraste en El Faro?

-Tal como suena.

-Pues agárrate que vienen curvas: tengo un informe firmado por el médico evaluador jefe del INSS en el que dice que tu accidente no fue laboral. Vamos, que la paliza que te dieron los tres guardias no ocurrió en horas de trabajo.

-¿Cómo?

-Como lo oyes... Es lo que él dice cuando calificó tu petición de invalidez por accidente laboral.

-¿Cómo se llama el médico?

-Enrique Martínez de Salazar Bascuñana.

-Ya, lo recuerdo perfectamente: ese es un gaditano que suele preguntar que tal anda uno de sexo cuando sufre un accidente y ha de sentarse frente a él para responderle a sus preguntas.

-El mismo que la tenía tomada con Emilio Cózar Carmen y le echaba todas las culpas de cuantos contratiempos surgían con quienes solicitaban la invalidez.

-Me imagino que será militante del PP, ¿no?

-Cierto. Y además me han dicho que antes, cuando estaba Luis Vicente Moro en la Delegación del Gobierno, trataba por todos los medios de rendirle pleitesía.

-Bueno, a otra cosa, mariposa. Aunque has hecho muy bien poniéndome al tanto de un asunto que yo desconocía.

-¿Desconoces aún los nombres de quienes estuvieron complicados en la agresión que sufriste?

-No. He ido, durante los años que han ido pasando, preguntando a quienes debía y he terminado por saber los nombres de algunos de ellos.

-¿Has perdonado a los que participaron en la canallada?

-Vaya el tópico por delante: perdono pero no olvido.

-¿Es verdad que sigues esperando las disculpas de quien te han asegurado que hizo todo lo posible para que tus agresores tuvieran cobertura de abogado con cargo a la Administracción Local?

-Esa persona, que tú conoces tan bien como yo, no me ha pedido disculpas ni me las pedirá por una razón muy sencilla: porque tendría que explicarme muchas cosas que podrían dañar su imagen y la de otros políticos.

-Lo cual es una cobardía de tomo y lomo.

-Naturalmente que es así. Pero no se le pueden pedir peras al olmo.

-¿Tú crees que, a pesar del mucho tiempo transcurrido desde que te dejaron maltrecho aquel 24 de diciembre, durante la cena de esta noche no se les calcará la cobardía en la cara y ésta se hará visible ante los suyos?

-Puede ser. Aunque no lo creo. Si acaso, en algún momento, cuando recuerden asunto tan indigno, lo único que harán es ponerse ciego de lo que sea con tal de no asumir lo ocurrido.

-¿Cuándo escribirás ese libro donde, cambiando lo que haya que cambiar, veamos reflejadas muchas cosas de las que algunos han sido protagonistas en los últimos años?

-Cuando tenga tiempo, metijón; cuando tenga tiempo y ganas de aclarar comportamientos.
 

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