PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura


Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

SOCIEDAD - VIERNES 4 DE NOVIEMBRE DE 2005


Comedor de Luna Blanca. EL PUEBLO

religión / RAMADÁN
 

La comunidad islámica
celebra el final del ayuno
y del mes de Ramadán

El llamado rezo de la Pascua da paso a un período más íntimo de celebración familiar
 

CEUTA
Pedro García Luaces

pedrogarcia
@elpueblodeceuta.com

El final del Ramadán supone dos alegrías para el musulmán: por un lado la ruptura del ayuno, una alegría que experimenta diariamente, en segundo lugar, el final del mes y de la celebración. Al día siguiente, por la mañana, tiene lugar el rezo de la Pascua. Es hacia las 9,30 horas y se celebra en la mezquita, independientemente de los cinco rezos diarios obligatorios.

Al salir del rezo es importante la felicitación entre los distintos miembros de la comunidad. Luego, tras el desayuno en familia, suelen hacerse visitas a otros familiares, enfermos o personas más desfavorecidas. La sunna del profeta recomienda que el cabeza de familia ofrezca un diezmo o limosna de 3 euros por miembro familiar a un necesitado.

“El almuerzo durante este día es similar a lo que sería un almuerzo de Navidad para las familias cristianas. Pero aquí el tema ya se desarrolla íntimamente en familia y cada uno lo vive de una u otra manera”, explica Karim, presidente de una asociación juvenil en la barriada del Príncipe.

La fiesta religiosa de fin de Ramadán, el Id-al-fitr, dura un solo día, aunque según la tradición, la fiesta popular se alarga durante tres días. Se trata de un tiempo de comunidad y familia, preferentemente.
 


Empieza un periodo interior de reflexión

“Tras el Ramadán comienza un período de armonía familiar, de encuentro, de diálogo, de reposo y de reflexión. Reflexión personal, acerca de las experiencias vividas a lo largo del mes en un plano interior y espiritual de comunión con Dios. Y reflexión en un ámbito social y familiar, evaluando la delincuancia, los problemas sociales, los ánimos de la comunidad, la comparativa respecto a otros meses del año”, explica Mustafa Abdelkader, presidente de Luna Blanca.

Los cabezas de familia evalúan la actitud que han demostrado los niños que han empezado a ayunar. En definitiva, es un período de fiesta, aunque el musulmán, indica Mustafa Abdelkader, “siempre está de fiesta cuando cumple con Dios”.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto