El Partido Socialista de Ceuta ha visitado esta semana la
Barriada del Morro, zona de la ciudad con un millar de
personas censadas. El partido, a través de un comunicado de
prensa, señala que su visita responde a la necesidad de
comprobar las quejas de los vecinos “provocadas por el
estado de abandono que sufre esta barriada”. El diputado
socialista, Sergio Moreno, asegura que existen “gravísimas
carencias” en las instalaciones de uso público.
Por un lado, el asfaltado, que el PSOE califica como “propio
de un país tercermundista y que en algunas zonas pone en
peligro tanto a viandantes como a vehículos”. En segundo
lugar, el comunicado señala que los puntos de luz “brillan
por su ausencia” y que algunas zonas “quedan completamente a
oscuras durante la noche”. La red de saneamiento, a juicio
del PSOE, “deja mucho que desear” y que las aceras “se
encharcan con facilidad”.
Por otro lado, el Partido Socialista denuncia la existencia
de un vertedero incontrolado “en medio de la barriada” que
ha sido, según explica la nota, “denunciado en múltiples
ocasiones por la presencia de ratas”.
En último lugar, tras la visita, el PSOE ha detectado
“graves aglomeraciones de tráfico en horas punta”, debido a
la “total ausencia de presencia policial” y a obras mal
ejecutadas, sobre todo en la calle Flecha Bermúdez.
Finalmente, el PSOE señala que la solución a los problemas
de la barriada pasan por establecer “un planteamiento serio”
de cara a las mejoras. En concreto, sus propuestas se
ajustan al cambio de eucaliptos por árboles autóctonos y
“menos agresiva”, implante de cortafuegos, así como de
“vigilancia intensiva”.
Al diputado socialista, Sergio Moreno, le acompañó en su
visita el presidente de la barriada del Morro, Abdelkader
Hossain, quien se encargó de poner de manifiesto los
problemas del vecindario. El PSOE señala que la zona fue
“obviada en el primer plan de dotación y ha tenido que
esperar al segundo para recibir respuesta oficial”. Acerca
de la dotación presupuestaria, desde el Partido Socialista
se asegura que sólo se ha puesto en marcha “un porcentaje
ridículo, si tenemos en cuenta el estado de marginalidad en
que se encuentra el barrio”.
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