En la mañana de ayer, el propietario de la Hamburguesería
Gran Max, ubicada en la Avenida Lisboa nº 65, Mohamed
Mohamed Abdeselam, acudió a nuestro rotativo para denunciar
una presunta persecución.
Ya que el pasado sábado entre las 4:30 horas y las 5:00
horas de la madrugada el establecimiento al parecer fue
incendiado intencionadamente.
Mohamed Mohamed, que mostró la denuncia en nuestro rotativo
afirmó que la teoría de que esté sufriendo una persecución
es porque esta pasada madrugada su hermana ha visto como,
nuevamente unos desalmados le han quemado su coche, un
Renault Clio que se encontraba estacionado en la calle
Varela y donde en la cercanía han encontrado una botella con
un fuerte olor a gasolina.
El propietario del local se encuentra destrozado ya que
afirma que a sus cuarenta años nunca ha tenido ningún tipo
de altercado y que no entiende porqué le están haciendo
esto. En cuanto al trabajo de la Policía destacaba que
entiende que es pronto todavía para saber algo pero que
necesita encontrar respuesta a todo ello, ya que él es un
padre de familia, con dos hijos, y que esta presunta
persecución le está afectando ya que le han destrozado el
local, con el que consigue dar de comer a sus hijos y a su
familia.
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La denuncia
En la denuncia se recoge como
sucedieron los hechos, donde a las 4:45 horas recibió una
llamada en la que se le avisaba de que el local estaba
ardiendo. Personándose en el local, los bomberos sofocaron
el incendio, y según las primeras investigaciones, unos
soldados que estaban de servicio en el acuartelamiento de
Regulares Tres vieron por la zona a dos individuos, uno con
chandal negro y una especie de braga que le tapaba parte del
rostro y otro con una sudadera blanca con capucha que
también le ocultaba el rostro.
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