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Los miembros de la Junta de Gobierno de la Hermandad de
Penitencia y Cofradía de Nuestro Padre Jesús Cautivo y
Rescatado (Medinaceli) y María Santísima de los Dolores se
dieron cita ayer para jurar sus cargos. Este acto, que tiene
lugar cada cuatro años, consistió en una ceremonia donde el
actual Hermano Mayor, Francisco Hernández Martín, y el resto
de los miembros de la Junta de Gobierno realizaron un
juramento por el que promenten servir fielmente a la
hermandad y cumplir con las funciones de su cargo.
Este evento consta además de una misa que realizaron el
director espiritual de la hermandad, José Manuel González, y
un franciscano, el hermano Diego.
El Hermano Mayor fue quien dió paso al solemne acto en el
que los trece miembros de la Junta de Gobierno de la
nombrada hermandad procedieron a jurar su cargo sobre el
Libro de Reglas de la cofradía. Cada uno de los integrantes
manifestó su voluntad de desempeñar de forma correcta el
cargo que ocupa.
Entre los elegidos, destaca la presencia de una mujer,
Josefa Carrasco, quien añadió que “es un orgullo formar
parte de esta junta”. Para estas personas es un honor tener
una representación en la cofradía del Medinaceli, ya que la
hermandad, creada en el siglo XVIII, es una de las más
conocidas de la Ciudad Autónoma de Ceuta. “La fe que
miles de ceutíes le tienen hace que unas diez mil personas
acompañen al Cristo durante la procesión” argumenta
Francisco Hernández.
Los distintos componentes que forman la Junta de Gobierno
son Francisco Martín como Hermano Mayor, Antonio Damián como
Vicehermano Mayor, José González como Secretario, Isidro
Cortina como Tesorero, Pedro Martín como Fiscal, Cristóbal
Campoy como Vocal de Cultos, Enrique Pato como Vocal de
Caridad, Ángel Fernández como Vocal de Formación, Manuel
Creo como Prioste y Vocal de Prensa, Josefa Carrasco como
Camarera, Aurelio Feria como Vocal de Actividades
Culturales, Celestino Antúñez como Mayordomo Primero y Juan
Manuel González como Mayordomo Segundo. Todos ellos
acudieron a la ceremonia portando la medalla de la
hermandad, que es de color morado como la túnica del
conocido Cristo.
El acto, que se celebró en la capilla de la Cruz Blanca,
contó con la presencia de unas cuarenta personas, entre las
que se encontraban disminuidos psíquicos y físiscos,de este
centro con el que la hermandad guarda muy buena relación
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