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Por desgracia son muchas las
personas que están en la cola del Inem, buscando un puesto
de trabajo, por mucho que los políticos se empeñen en querer
comernos el coco diciendo que, cada día, hay menos paro y
más trabajo y no sé cuántos cientos de miles encuentran
colocación casi todos los meses.
Uno, que es un jartá de crédulo, algo así como aquel que le
dijeron que iba un burro volando y miró al cielo, se cree
todo esto y mucho más.
Me costaría trabajo creer y hasta creería que estando en la
cola del paro, te puedes hacer multimillonario, con grandes
casas, hoteles, palacios, caballos de carrera, coches de
lujo y hasta ganadería de toros bravos.
Si ustedes usease vusotros, no creeís que estando en la cola
del paro, se puede llegar a ser multimillonario, teniendo
todo cuanto hemos relatado, aunque parezca “duro” de
entender, pueden preguntarle a Roca. Porque, Roca, antes de
tener todo esto, estába ocupando su lugar, correspondiente,
en la lista del INEM. Y ya ven toda la inmensa fortuna que
ha conseguido por semejante situación y vivir en Marbella.
Lugar donde el personal se tira a la calle para protestar
por tanta corrupción, cuando fueron ellos los que votaron a
todos estos que durante años les han gobernado ¿Dé qué se
quejan, si tienen lo que, siempre, han querido?.
Déjemos esto porque los errores se pagan y ellos van a pagar
a muy alto precio el error que supuso lo que durante tantos
años votaron con vitores , banderas al viento y no hay, en
el mundo entero, mejores gobernantes que los que tenemos
nosotros en Marbella.
Aquí, en el asalto desde la otra orilla, para gobernar
nuestra tierra, también pudimos presenciar, esos vitores,
esos cánticos y todas esas banderas al viento que, incluso
acompañaron , en la entrada triunfal al ayuntamiento, a la
tránsfuga que permitió que el GIL gobernara, por poco tiempo
¡menos mal!, Ceuta.
Pero, bueno, tampoco las criaturitas que se alejaron del GIL
o sea los que permitieron, con un voto de censura, que
entrara a gobernar el Partido Popular, han escapado mal
parados, siguieron gobernando con el Partido Popular hasta
la llegada de las elecciones y algunos de esos que se
entregaron, en cuerpo y alma, a defender al GIL, , hoy día,
siguen ocupando, gracia a los populares, buenos puestecitos
y ganando una pasta gansa. Mientras que todos aquellos que
luchamos, con todas nuestras fuerzas, para evitar la mayoría
absoluta del GIL, jugándonos mucho más de lo que algunos
puedan creer, ni las gracias, tú.
Si caso, se nos mira, por parte de algunos de estos
populares, por encima del hombro, como si por nuestro
trabajo en favor de ellos, hubiésemos cometido el mayor de
los pecados del mundo. Si las cartas se pudiesen jugar dos
veces, se iban a enterar, todos estos inútiles, que nos
miran por encima del hombro, de lo que vale el peine ¡Vivir
para ver!.
Pues no se preocupe, amigo guardia, porque aún no a visto
usted nada de nada. Un siglo de estos, pase lo que pase, que
me coja con el pie cambiado, voy a contar la verdad de
cuanto sucedió, una noche de elecciones, incluidas las
palabras, las acciones y los comentarios de algunos
personajillos que, jamás, llegarán a personajes, porque le
faltan calidad y conocimientos. Todo se andará, porque los
que siembran vientos, con toda seguridad, recogen
tempestades.
Mi abuela, la sabia, esa viejecita a la que servidor adoraba
decía que si algo admiraba, de mi persona, era la paciencia
que me había dado Dios. Y llevaba toda la razón del mundo,
siempre he tenido una gran paciencia, aplicando aquello de
que al burro hay que darle el palo cuando se cae, dárselo
antes no vale absolutamente para nada, porque nada ha hecho
el animal para merecer el castigo.
Se me ha ido, como vulgarmente se dice, el santo al cielo,
pasando de lo que les estába contando, a ustedes, sobre eso
de estar en el paro y hacerse en nada millonario, a
contarles ciertos acontecimientos que sucedieron en nuestra
tierra y de los que no nos hemos olvidados, como tampoco nos
hemos olvidado de algún que otro personajillo, politiquillo
de medio pelo. Pero, en este asunto, Job a mi lado un
aprendiz.
Todo llegará incluso el momento, de coger el barco, y
hacernos el, consabido cortes de manga. Pero ojo a los
navegantes, como decía aquel: “cuando las barbas de tu
vecino veas afeitar, pon las tuyas a remojar”. Fin, de
momento.
Volvemos al principio aunque, Roca, de estar en la lista del
paro haya pasado a ser multimillonario, no intenten ninguno
de los que estén en las listas del INEM, imitarle porque ya
ven como va a acabar.
La justicia es lenta pero segura y cuando llega al inicio de
su camino ya es imparable. Más vale pájar en mano que
cientos volando.Y no se pueden imaginar, ustedes, la
cantidad de pájaros que, de momento, están volando pero que,
de un momento a otro, pueden caer en las redes de los
cazadores.
Los cazadores son gentes pacientes, y esa paciencia les
permite coger las piezas.
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OPINIÓN / MIS COSAS
