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El presidente de la UDCE, Mohamed Alí, ha comunicado su
intención de vigilar el proceso de desalojo de las viviendas
a cargo del ministerio de Defensa para que ninguna de las
familias, ni las que salen ni las que se quedan, resulten
perjudicadas. Asumido el acuerdo entre la Comandancia y la
Ciudad Autónoma de Ceuta para el realojo de las primeras 30
familias desalojadas, el presidente de la Unión Demócrata
ceutí quiere asegurarse de que se mantenga el hecho de ser
afectado de los desalojos de Defensa como criterio de
adjudicación prioritaria de un piso protegido.
Mohamed Alí considera que los trabajos de derribo deben
hacerse igualmente maximizando las medidas de seguridad y
los cuidados para no afectar a las viviendas próximas
mientras aún estén habitadas. “Debe procederse a los
derribos con suma meticulosidad y prudencia, porque las
viviendas están muy próximas a otras donde aún vive gente,
incluídos niños, mayores y enfermos”, explica el líder de la
UDCE, que lleva vinculado a este tema desde que comenzaron
las protestas de los vecinos. “Otro tema a tener en cuenta
es que muchas de estas viviendas comparten suministros de
agua o cables eléctricos y es necesario ser muy cuidadoso
para no afectar a las casas colindantes, ya que una avería
de este tipo tarda 15 días en repararse”.
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