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El paso fronterizo del Tarajal es el centro de atención de
todos, envuelto en una calma tensa con el recuerdo puesto de
reojo en los sucesos del pasado jueves que terminaron con
cinco policías heridos y dos ciudadanos contusionados.
Autoridades, usuarios y comerciantes aguantan la respiración
y rezan para que no vuelvan a repetirse avalanchas y todo
transcurra con cierta normalidad.
“Estamos todos muy preocupados”, reconoce Ramesh
Chandiramani, “ y también nosotros tememos que puedan
repetirse hechos aún más graves que los ocurridos el pasado
jueves, pero muchas familias viven directamente del Biutz,
que se ha demostrado beneficioso para el comercio y para la
Ciudad”, dice Chandiramani, recordando que el importante
aumento de la actividad que ha supuesto la apertura de esta
frontera comercial revierte también en las arcas
municipales, “pues la Ciudad recauda el diez por ciento de
las importaciones a través del IPSI”.
“Es necesario pensar en positivo, si el Biutz se ha abierto
y es beneficioso para la ciudad no hay que pensar en
cerrarlo porque da problemas sino en regularizarlo”, dice el
presidente de los comerciantes del Polígono del Tarajal en
respuesta a la propuesta del Sindicato Unificado de Policía
(SUP) de cerrar el paso fronterizo habilitado para el
tráfico de mercancías entre Ceuta y Marruecos ante la
imposibilidad de controlar la seguridad de las más de 3.000
personas que cruzan a diario la zona para realizar
actividades comerciales.
Problemas de seguridad que culminaron el pasado jueves con
una avalancha de más de dos mil personas que provocaron
siete heridos, entre ellos cinco agentes de la Policía
Nacional. “Si hay problemas hay que solucionarlos, no cerrar
el paso”, responde Chandiramani a la propuesta del
secretario general del SUP en Ceuta, Andrés Carrera, “hay
que replantearlo, organizarlo y lograr que sea un lugar de
trabajo digno y seguro para comerciantes y autoridades”.
La asociación de comerciantes del Tarajal, que preside
Chandiramani, ha presentado a la Delegación de Gobierno y a
la Ciudad dos propuestas para mantener la seguridad en el
paso fronterizo. Uno de ellos propone una alternativa para
las labores de vigilancia privada durante la noche, desde
las ocho de la tarde a las ocho de la mañana y un segundo
más ambicioso para reorganizar el Puente del Biutz. Ambos
están en manos de las autoridades competentes y la
asociación está a la espera de llevar a cabo una reunión
tres bandas que podría celebrarse esta misma semana.
Chandiramani sostiene que con las actuales condiciones
“lógico”que haya problemas y avalanchas. 4.000 personas
luchan por atravesar el estrecho paso fronterizo abierto tan
sólo cuatro horas diarias cuatro días por semana. “Hay que
buscar pasos alternativos, quizá Benzú o el paso junto a la
ITV, habilitar pasos para los bultos grandes incluso por la
propia frontera”, proponen desde el Tarajal. “Debemos
analizar el problema y prepararnos para la eliminación de
aranceles en 2010”.
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Chandiramani propone abrir una aduana comercial con
Marruecos
Ramesh Chandiramani ha presentado
su candidatura al relevo de la presidencia de la Cámara de
Comercio de la Ciudad Autónoma de Ceuta, ahora presidida por
Luis Moreno Naranjo. Su programa está imbuido por un
espíritu comercial que queda definido por su principal
reivindicación: la apertura de una aduana comercial con
Marruecos. “Si somos frontera Sur de Europa lo somos para
personas y para mercancías”, sostiene Chandiramani.
Su candidatura, arropada por un nutrido grupo de empresarios
ceutíes, viene a plantear un cambio de rumbo en el órgano
cameral ceutí. “queremos reivindicar nuevos sistemas
empresariales y comerciales para sacar a ceuta de su agonía
económica”, dice el candidato, que asegura que la directiva
presidida por Moreno ha cumplido su ciclo y ahora los
comerciantes y empresarios de Ceuta “necesitamos más”.
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FRONTERA / COMERCIO
