PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura


Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

ACTUALIDAD - JUEVES, 06 DE JULIO DE 2006


Incendio en garcía aldave. nicol's.

incendio / negligencia
 

Un fuego en García Aldave
arrasa más de 5 hectáreas de
la zona militar ‘K-8’

Bomberos, Protección Civil, Guardia Civil, Policía Local, Cruz Roja, Parque Móvil y cubas de Urbaser actuaron en perfecta coordinación
 

CEUTA
A.G./P.G.L.
local
@elpueblodeceuta.com

Un incendio cuyas causas están sin determinar, asólo más de cinco hectáreas de la zona militar ‘K-8’ ubicada en el monte de García Aldave y en el que se debieron emplear a fondo para su control, más de setenta personas participando en las tareas de extinción en una actuación perfectamente coordinada en el marco del Plan de Emergencias activado ante este espectácular siniestro.

Una negligencia podría ser la causa de que el fuego, ayudado por el fuerte viento de poniente -muy protagonista en la zona-, haya logrado cuajar aprovechando el ‘combustible’ natural que proporciona el muy seco monte bajo, predominante en este sector militar.

Una llamada de aviso urgente, sobre las seis de la tarde, a la centralita de los servicios de extinción de incendios de la Ciuda Autónoma, alertó de la importancia del siniestro.

Treinta y cinco bomberos apoyados por cinco camiones cisterna, 20 agentes de la Guardia Civil, 15 voluntarios de Protección Civil, Parque Móvil, Cruz Roja, Urbaser con sus camiones cuba y Policía Local mantuvieron la tensión y el arrojo necesario como para lograr el control, pese a las dificultades, del fuego. Su extinción aún no había sido efectiva al cien por cien al cierre de nuestra edición y los efectivos del Parque de Bomberos trataban de enfriar la zona para evitar que el viento reactivase el incendio merced a las múltiples briznas que aún, a las once de la noche, se apreciaban.

Carolina Pérez, consejera de Medio Ambiente y Manuel Coronado, consejero de Gobernación estuvieron ‘in situ’, durante las operaciones y, pese a haberse solicitado a Delegación del Gobierno, la preparación y disponibilidad de algún hidroavión, los propios técnicos rechazaron tal posibilidad dado que los trabajos para el control del siniestro funcionaron realmente bien.

Más de cien mil litros de agua no potable se habían consumido en las tareas de extinción cuando aún el reloj marcaba las nueve y media de la noche. Al cierre de esta edición las labores continuaban y el silencio sobre cómo podía haber quedado afectado el equipamiento militar de la zona era absoluto. Lo que sí consta es que soldados participaron y colaboraron en las tareas con extinciones manuales para prevenir, posiblemente, que el fuego alcanzara o destruyera algunas de sus instalaciones. La Comandancia General rehusó hacer declaraciones, remitiendo a los medios a una nota de prensa que emitirá, supuestamente, hoy.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto