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Festividad de la ‘Estrella de los Mares’, ningún lugar mejor
para celebrarla que en un rinconcito situado a orillas del
Mediterráneo. Bonitas imágenes y momentos conmovedores
quedarán permanentemente guardado en la memoria de sus
residentes, los cuales arroparon, una vez más, a la Patrona
de los pescadores, Ntra. Sra. del Carmen.
El día estaba cargado de actos en honor a la Imagen del
Carmen. El primero se celebró a las 12 horas, en la Iglesia
de África, donde decenas de ceutíes asistieron a la Misa con
el propósito de orar por los pescadores y por las familias
que viven del mar.
Dos horas más tarde tuvo lugar en el Casinillo de la Legión
una copa, a la que asistieron autoridades civiles y
militares. El buen ambiente reinante y el excelente día de
verano eran claras pistas para saber que la jornada iba a
ser inolvidable.
Ya por la tarde, concretamente a las 20 horas tenía lugar,
también en el Santuario de Ntra. Sra. de África, una Solemne
Misa, la cual fue muy concurrida. A esa misma hora, la Plaza
de África esperaba, plagada de público, la salida de la
Imagen del Carmen. Eran muy pocos los ceutíes que querían
perderse tal acto, el cual no encontramos palabras para
definirlo. Sencillamente magnífico.
A las 21 horas Ntra. Sra. del Carmen salía por la puerta del
Templo. Entonces comenzó a sonar la ‘Salve Marinera’, música
que puso la Asociación Cultural Banda de Música Ciudad de
Ceuta.
Entre el cortejo que daba paso a la Patrona de los
pescadores pudimos ver al Presidente de la Ciudad Autónoma
de Ceuta, Juan Jesús Vivas Lara, al presidente de la
Autoridad Portuaria, José Torrado, a la Consejera de
Educación y Cultura, Mabel Deu, y al Viceconsejero de
Festejos, Juan Carlos García Bernardo, entre otros. Era la
primera vez que Juan Vivas acompañaba a la Virgen del Carmen
y, como es común en él, se volcó con el pueblo ceutí y
acompañó a la Patrona de los pescadores en todo su
recorrido.
A las 22 horas, la Virgen del Carmen era subida a bordo del
barco ‘Mi Joselín’, en el cual iban montados decenas de
ceutíes. Entonces la flota pesquera y alguna que otra
embarcación deportiva se sumaban a la procesión marítima.
El ruido de los cohetes avisaban, a los que decidieron no
acudir a los actos, que la Imagen del Carmen ya navegaba por
aguas ceutíes.
Hora más tarde la Virgen del Carmen estaba de nuevo en
tierra firme, donde volvían a esperarle cientos de ceutíes
para acompañarla en procesión hasta el Templo del cual salió
a las nueve de la noche. Hacía quince años que la Patrona de
los pescadores no volvía a la Iglesia de África después de
navegar por el puerto ceutí.
Los fuegos artificiales del final de la noche fueron la
guinda del exquisito pastel que los que tuvimos la
oportunidad de probar, degustamos en nuestro interior.
La Cofradía de Pescadores volvió a demostrar que la
procesión del Carmen era un buen motivo para no salir de la
ciudad este fin de semana.
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día de la virgen del carmen /
celebración
