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El metijón me dice que está
viviendo una semana intensa en muchos aspectos. Empezaste
tú, Manolo, poniendo los puntos sobre las íes a unas
declaraciones inoportunas y malintencionadas de un Calderé
que cayó en la trampa que le tendió el muchacho de El
Silbato. Un locutor a quien se le nota mucha la aversión que
siente por José Antonio Muñoz y su hijo.
-No te equivoques, metijón. La aversión de muchos locutores
deportivos, y el de El Silbato no es la excepción, está
dirigida a los dirigentes ganadores.
-¿Por qué...?
-Porque les interesa más conversar con los perdedores y
sacarles partido a sus dimes y diretes, a sus fobias y
filias, a fin de evitar hablar de algo que los locutores
desconocen: los secretos del fútbol.
-De acuerdo. Pero no me negarás que también los ganadores
han de saber escuchar a tiempo los consejos que reciben.
-Desde luego que sí. Si bien esos consejos han de llegarles
por medio de personas que demuestren acertar más que errar.
El movimiento se demuestra andando.
-¿Qué te parece la dimisión de Florentino Pérez?
-Que era la única salida que le quedaba y ha hecho bien en
darse el piro.
-Pues hay periodistas que lo están tachando de cobarde.
-Cobarde fue mientras consintió que le impusieran
renovaciones de jugadores con las que no estaba de acuerdo.
Y optó por la vía equivocada: dar el visto bueno, aunque
tupido con hipocresías y trágalas.
-¿Qué me puedes decir de la selección española?
-Que tiene los mismos problemas que el Madrid.
-¿Cuáles?
-Que para ganar necesita hacer dos o tres goles todos los
partidos.
-¡Tata, tata, tata! Que te veo venir otra vez diciendo que
Casillas es el culpable de todos los males.
-Lo ves, estimado metijón, hasta tú que me tienes mucha ley
tratas de disuadirme al respecto.
-Cambiemos de tercio.
-Lo ves, a ti te pasa igual que a todas esas personas que
cuando no saben de lo que se les habla piden inmediatamente
que se cambie de conversación. Lo entiendo. Bien, dime de
qué quieres seguir pegando la hebra.
-De lo ocurrido con la chirigota de “Los polluelos con pelos
en los güevos”.
-Pues a mí no es asunto del que me guste hablar por hablar.
Es más, después de que se me publiquen Los apuntes de seis
días, trataré de olvidar, salvo que surjan necesidades, un
tema que está dañando a la ciudad.
-¿Qué les recomendarías tú a quienes tienen facultades
suficientes para pedir calma y tejer lazos de unión entre
partes?
-Los consejos sólo son bien recibidos cuando proceden de
abogados y médicos. Y no siempre. Aunque bien harían en
leerse un libro que ya recomendé en su día y que me fue
recomendado a mí por persona ilustrada y con conocimientos
grandes de su tierra.
-No recuerdo, a pesar de ser lector tuyo, a qué libro te
refieres...
-Identidades asesinas es el título del libro escrito por
Amin Maalouf.
-¿De qué trata?
-Identidades asesinas “es una denuncia apasionada de la
locura que incita a los hombres a matarse entre sí en el
nombre de una etnia, lengua o religión. Una locura que
recorre el mundo de hoy desde Líbano hasta Afganistán, desde
Ruanda y Burundi hasta Yugoslavia, sin olvidar la Europa que
navega entre la creación de una casa común y el resurgir de
identidades locales en países como el reino Unido, Bélgica o
España”.
-¿Cuántas veces has leído Identidades asesinas?
-Lo tengo como libro de cabecera.
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OPINIÓN / EL OASIS
