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La Policía ha detenido en Melilla a dos presuntos
colaboradores del Grupo Islámico Combatiente de Marruecos,
la banda terrorista marroquí implicada en los atentados del
11 de marzo en Madrid, en relación con los atentados de
Casablanca en 2003.
Las detenciones se han producido por orden del juez de la
Audiencia Nacional Baltasar Garzón y la Policía presume que
los arrestados podrían estar integrados en grupos de ayuda
logística de esta banda terrorista, según el Ministerio del
Interior.
Según informó el Ministerio del Interior, los arrestados son
Ali A., nacido en Marruecos hace 43 años y de nacionalidad
belga, y a Nordin El Behri A.M., de 31 años y nacido en
Melilla.
Los presuntos miembros de la organización salafista
jihadista Grupo Islámico Combatiente Marroquí han sido
detenidos por su presunta implicación en los atentados de
Casablanca y por su supuesta integración en organización
terrorista.
Las detenciones se han producido en Melilla, en el marco de
la "Operación Rally", y según las investigaciones podrían
estar vinculados con el movimiento islamista radical
internacional dentro de los grupos dedicados a la ayuda
logística a favor de estructuras terroristas.
Los agentes de la Policía siguen practicando registros en
los domicilios de los detenidos y por el momento se han
incautado, en la vivienda de Ali A., de diversa
documentación, agendas personales, un telescopio, dos
maletines metálicos y dos CD-Rom, entre otros efectos,
además de un ordenador portátil, ubicado en su vehículo.
El marroquí de nacionalidad belga Ali A., detenido hoy en
Melilla junto a otra persona como presunto miembro del Grupo
Islámico Combatiente Marroquí, residía desde hace alrededor
de un año en la Ciudad Autónoma y llevaba una vida "poco
llamativa y tranquila".
Según dijo el delegado del Gobierno, José Fernández Chacón,
Ali A. es "al parecer" originario de Farhana, y su supuesta
relación con la organización salafista jihadista marroquí,
implicada en los atentados terroristas de Casablanca en
2003, "está clara".
Mientras, el segundo detenido, el melillense Nordin El Behri,
es "muy amigo" del primero y se le investiga por sus
contactos con éste.
Ninguno de los dos cuenta con antecedentes policiales,
precisó Chacón, quien destacó que residían en un barrio "muy
tranquilo" de Melilla, lejos de la zona de La Cañada, la
barriada más conflictiva de la ciudad y de mayoría
musulmana.Por el momento los dos detenidos permanecen en la
Jefatura Superior de Policía de Melilla, donde se les está
tomando declaración.
La operación "Rally" permanece abierta "y sigue su curso",
sin que de momento se prevean nuevas detenciones.
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TERRORISMO / ‘OPERACIÓN RALLY’
