PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura


Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

SOCIEDAD - LUNES, 20 DE NOVIEMBRE DE 2006


Ana Moya. el pueblo.

entrevista / ana moya
 

Ana Moya: “Para detener a alguien
lo que hace falta es maña no fuerza”

La delegada de la Plataforma de la Mujer
Policía en Ceuta reivindica la presencia
de las mujeres en los servicios operativos que presta la Policía Nacional en la ciudad
 

CEUTA
Verónica Fernández
veronicafernandez@elpueblodeceuta.com

La Asociación de Mujeres Policía nació hace cinco años en el seno del Cuerpo Nacional de Policía bajo el amparo del sindicato UFP (Unión Federal de Policía) aunque agrupa a mujeres pertenecientes a todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCS): policías nacionales miembros de la UFP, policías locales afiliadas al sindicato UGT y, a efectos de colaboración, las guardias civiles pertenecientes a la antigua Coproper, ahora llamada AUGC. Su principal objetivo es incorporar propuestas que mejoren la calidad en las relaciones laborales así como lograr que todas las funcionarias de las FCS puedan compatibilizar su vida laboral con la personal.

Aunque son muchas las mujeres que forman parte de la misma en toda España, ya que se trata de la única asociación de estas características inscrita en el Ministerio del Interior, en Ceuta, la cifra de afiliadas apenas supera la decena. Un número llamativo por ser bajo pero que no lo es tanto si tenemos en cuenta que en la Ciudad Autónoma las mujeres policía brillan por su ausencia: tan sólo una veintena de féminas trabajan para las FCS en cualquiera de sus cuerpos: Policía Nacional, Policía Local y Guardia Civil.

Aquí la asociación se ha constituido en plataforma al frente de la cual se encuentra la subinspectora de la Policía Nacional, Ana Moya, que lleva quince años de servicio en el cuerpo.

- UFP, UGT y AUGC. ¿La mujer que no esté afiliada no puede ser defendida por la Plataforma de la Mujer Policía?

- No, en absoluto, aunque una compañera no esté afiliada la defendemos igualmente porque, tal y como recogen nuestros estatutos, el objetivo es luchar contra la discriminación y defender a las mujeres policías. En Ceuta, tenemos la ayuda jurídica gratuita de UGT para los temas relacionados exclusivamente con mujeres, para lo demás, están los asesores jurídicos de la UFP. Nos encargamos de todo: denuncias públicas o privadas, casos de abusos, injusticias, acoso...

- La presencia femenina en las calles de la ciudad es inexistente en lo que al Cuerpo Nacional de Policía se refiere.

- Sí, casualmente el número de mujeres que pertenecen a la Policía Nacional nunca supera el 5% en todo el territorio nacional. En las convocatorias no hay cupo en función del sexo pero la realidad es que el número de mujeres no crece y eso que desde 1984 ha habido mujeres que han jurado el cargo de policías.

Aquí somos ocho, contando a las de prácticas, pero ninguna está desarrollando trabajo de calle por lo que es normal que la ciudadanía piense que no hay mujeres destinadas aquí. Todas estamos en servicios de investigación menos dos que están en la Oficina de Atención al Ciudadano. Pero, desde luego, no es que no queramos estar en servicios operativos, es que no nos ponen allí. Yo creo que es muy positivo que estemos de cara al público y que se vea el trabajo de la mujer porque como reivindicamos la igualdad, queremos que se vea que somos capaces de detener y de atender al ciudadano en iguales condiciones que un hombre. Por ello me gustaría ver mujeres en el 091, sólo han trabajado unas pocas de prácticas y yo estuve un tiempo como jefe de grupo, nada más. Voluntariamente nadie ha dicho me quiero ir de aquí ni ponme allá. Quiero dejar claro que no nos negamos a prestar servicios operativos pero si los jefes consideran que tenemos que estar en ciertos puestos que consideran importantes que nos pongan pero creo que también somos muy importantes de cara al ciudadano, que se nos vea.

- ¿El hecho de que la mujer tenga, por lo general, menos fuerza física os impide el desarrollo de alguna tarea?

- No. A nosotras en la Academia se nos forma con unas técnicas de defensa personal, de psicología y de capacidad interrogatoria para poder detener igual que un hombre porque pocas veces a la hora de detener tenemos que utilizar la fuerza. Casi siempre vale más la capacidad de convicción, la forma en que tú te impongas. Para detener lo que hace falta es maña no fuerza.Estamos capacitadas igual que cualquier compañero, otra cosa es que, a la hora de echar una carrera o tener un forcejeo igual estamos en inferioridad pero también lo está uno que tenga 50 años, uno que esté más grueso de lo normal o uno que esté excesivamente delgado o que sea excesivamente cobarde, que también los hay. Por eso me molestan enormemente los comentarios de algunos que dicen que no somos iguales o que se nos dan ciertos privilegios. No es cierto.

Estamos en igualdad de condiciones a la hora de detener, tenemos los mismos conocimientos técnicos, culturales y policiales para poder desarrollar bien nuestro trabajo en la vía pública.

- ¿Cuántas mujeres forman parte de la plataforma y cuáles son las principales quejas que plantean?

- Somos 20 mujeres entre los tres cuerpos y 14 de ellas están afiliadas. Yo llevo al frente de la Plataforma desde el año 2002 y las que más quejas plantean, aunque luego no quieren denunciar, son las policías nacionales pero quejas que hayan sido denunciadas y se hayan sacado a la luz pública vía juzgado, vía defensor del pueblo o vía medios de comunicación han sido más las de las policías locales y en la Guardia Civil tan sólo se ha contabilizado un caso.

- ¿A qué se debe esa falta de denuncias en la Policía Nacional?

- Eso me gustaría saber a mí porque si una compañera sufre acoso sexual o laboral y no lo quiere denunciar, por supuesto yo lo voy a respetar porque estamos hablando de un delito privado aunque, desde luego, casos hay y siempre se producen entre jefe y subordinada.

Yo creo que en la Policía Nacional hay compañerismo. Estamos trabajando en unas condiciones infrahumanas y eso nos hace acercarnos más entre compañeros pero, en el caso de las mujeres, muchas veces tienen que estar apoyadas por sus compañeros porque, cuando están siendo acosadas laboral o sexualmente la cooperación de los compañeros es fundamental.

En cuanto a las quejas, nos reunimos cada dos o tres meses y las quejas son siempre las mismas: faltas de respeto por el hecho de tener alguna capacidad de mando o decisoria y que su opinión no sea tenida en cuenta como la del hombre. Ocurren y se quejan pero, en muchos casos, no son actitudes que ellas vean con la gravedad suficiente para denunciar aunque los casos en que ellas ven que sí son denunciables, las hemos apoyado, ellas se han armado de valor y han denunciado.

Hasta ahora tenemos dos casos de acoso laboral y otro de persecución además de faltas de respeto y comentarios jocosos entre compañeros.

- Y comparado con la Península, ¿cómo es la situación?

- En el resto del territorio nacional se han producido agresiones sexuales y hasta abortos. Aquí lo que sucede es mucho más light aunque es evidente que para las compañeras que lo han sufrido son cosas graves que les han provocado, incluso, bajas psicológicas.

Algo bastante habitual es que algunos compañeros no quieren mujeres como compañeras porque sus esposas pueden ponerse celosas. Por desgracia las mujeres policía todavía tenemos que sufrir cosas como éstas.

- ¿Cuál es el perfil de la mujer que viene destinada a Ceuta?

- Hasta ahora han estado viniendo muchas de fuera pero, últimamente, han salido de la Academia de Ávila cinco o seis de Ceuta que han estado aquí de prácticas pero que, a la hora de conseguir destinos, no han conseguido Ceuta y la que más cerca se ha quedado está en Algeciras. Así que sí hay mujeres policía que quieran venir aquí pero como hay muchos más hombres, es más fácil que le asignen este destino a un hombre por una cuestión de proporciones.

De las ocho que somos actualmente, cuatro con el cargo jurado y cuatro de prácticas, dos somos de aquí y una tercera está afincada en la ciudad por lo que somos tres las que no queremos movernos de Ceuta.

- ¿Varía mucho la plantilla de la Policía Nacional de Ceuta?

- Sí porque es una plantilla con una edad media de sus funcionarios bastante elevada comparada con el resto de España. La media puede rondar los 50 años aunque ahora están adjudicando nuevas plazas, insuficientes, y está viniendo gente más joven. Sin embargo, la plantilla cada vez va a menos, están dejando el cuerpo muchos más de los que se incorporan.

Por ejemplo, las Unidades de Vigilancia de las Mujeres Maltratadas deberían estar formadas por, al menos, ocho agentes y en la actualidad sólo hay tres y eso es un déficit muy importante porque estas mujeres necesitan estar atendidas porque no hay que olvidar que Ceuta está a la cabeza de denuncias de toda España y no hay agentes suficientes para hacer un seguimiento a estas víctimas.

Esta unidad la llevan actualmente policías en segunda actividad y no policías en activo y lo suyo sería que hubiera una modificación legislativa que estipule que no haya policías en segunda actividad porque estamos viendo que no es efectivo y, por lo tanto, deberían ser policías operativos los que se encargasen de este servicio.

- ¿Y los detenidos os respetan?

- Yo creo que con esto es como con todo, encontrarás delincuentes que no te respeten pero no por el hecho de ser mujer sino por ser policía pero, que yo sepa, al menos en estos cinco años que lleva creada la plataforma, el tema de que los ciudadanos no nos respeten jamás he tenido esa queja. Sí puede suceder que vayas en pareja y se dirijan más al policía de sexo masculino que al femenino pero ya hablamos de una educación machista pero no de que nos trate discriminatoriamente que es diferente. Es más, por costumbre. Que piense que a lo mejor el varón manda más cuando, en realidad, es al revés. Sí nos podemos encontrar con cosas de estas pero no lo tomamos a mal porque estamos hablando de un tema de educación, ya no estamos hablando de discriminación propiamente dicha. Discriminación ciudadana no hemos tenido jamás, es más, llamamos la atención porque en toda España somos muy poquitas.

- ¿Es fácil para vosotras conciliar la vida familiar y la laboral?

- No. No se nos da ninguna ayuda y estamos sujetas a turnos y guardias como los demás compañeros. La mayoría somos madres, tenemos pareja y no todas tienen a su familia cerca. Nos vemos en circunstancias duras y encima tenemos que aguantar estos problemas, tenemos una carga tripe comparadas con otras mujeres trabajadoras que tienen unos horario mucho más estables.

- En lo que a la situación de la mujer dentro del cuerpo se refiere ¿ha cambiado mucho la situación en los últimos años?

- Sí. Yo, como responsable de la plataforma, tengo que hablar directamente con el superior denunciando la situación que sea y cuando no ha habido diálogo, la presión ejercida por los medios nos ha ayudado mucho. Todavía tenemos que seguir luchando para cambiar muchas cosas y yo por eso animo a todas las compañeras de la Guardia Civil y la Policía Local a que se pasen por nuestras reuniones para conocernos y hacer un poco de fuerza porque somos muy pocas y es importante que estemos unidas para ir consiguiendo cosas. Hay compañeras que no nos conocen y creen que están solas pero para eso está la Plataforma de la Mujer Policía, para ayudarlas.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto